Campañas, discursos, debates y otras mentiras rumbo a la presidencia de México

Después de poco más de tres meses de campañas electorales, donde los Cuatro Fantásticos lucharon por la presidencia del país --bueno, en realidad son sólo tres los que pelearon, porque hay uno que nunca estuvo compitiendo--, nos hemos dado cuenta que no ha ocurrió mucho, casi nada, tanto en las campañas como con los candidatos.

Pero hay que ver y analizar lo que ocurre con los candidatos, sus proyectos y sus propuestas, que no son más que meras fantasías y ridiculeses casi sin fundamento alguno; la doble cara Josefina Vázquez Mota, el galán de moda Enrique Peña Nieto; el amante de los mexicanos Andrés Manuel López Obrador y el fantasma Gabriel Quadri, se la han pasado vendiéndonos humo y probando que su único objetivo es llegar a la Silla y conseguir el poder, y ya si logran hacer algo por el país pues vendría siendo ganacia.

Si han escuchado (y si tienen la capacidad, analizado y reflexionado) las propuestas de campañas de los candidatos, se habrán dado cuenta que están llenas de falsedades y muy alejadas de la realidad o nuestra realidad; prácticamente te prometen otro país, convertir a México en Alemania, Nueva Zelanda o cualquier otro país desarrollado donde el ateísmo no es tan aplastado por la religión (también conocido como Ignorantismo).

Lo peor del caso es que esa falsedad es tan obvia que hasta ya se ha convertido en algo normal, como en una característica de los aspirantes; y es que a la hora de sus tan famosos y originales discursos se puede notar lo tan poco convencidos que están de sus propias palabras.

Enrique Peña Nieto, el pacificador
Como ejemplo claro, es lo que propone el guapo y carismático Enrique Peña Nieto, el virtual presidente de México, según las encuestas, los periodistas, los programas de televión y sus propios contrincantes. El señor de los peinados dice que si llega a la presidencia de México, hará posible que más del 90% de las personas del país tengan, cómo mínimo, estudios de nivel preparatoria, pondrá fin al analfabetismo, y hará que todo la sociedad mexicana sea una sociedad estudiosa y preparada; pero no sólo eso, sino que además terminará de una vez por todas con la violencia que impera en el país (lo que Calderón no hizo), acabará con la pobreza y la desigualdad, todo esto en tan sólo un sexenio --es decir, en 6 años--.

Todo esto se conseguirá en sólo 6 años, el libro de Récord Guinnes ya espera a Peña Nieto, a AMLO y a Vázquez Mota, porque todos también prometen lo mismo.

Dicen que Peña Nieto ganará las elecciones, es el favorito, así lo marcan todos, y si así lo dicen todos, pues así será, ya que esto de las encuestas, los programas de televisión y medios de comunicación, influyen bastante en los votantes. Vendría siendo como una moda, algo así como el fenómeno del "Chicharito", ¿todo mundo lo idolatra? pues yo también; y ahí vamos todos a votar por Peña.

Y es que en realidad no importa por quién votemos, porque todos los candidatos no nos ofrecen nada; y basta con ver sus discursos preparados, en un 80%, por otras personas, ¿o acaso piensan que el próximo mandatario(a) hará diferencia?. Enrique Peña Nieto comenzó ésta estrategia de "yo no hago la guerra, yo hago el amor (y si no, miren cuántos hijos tengo)", el famoso "yo no divido al país", y claro que no, porque le conviene, y no saben cuánto; mientras los demás, sus tres rivales, hablan de él, mientras los medios hablan de él y mientras las encuestas hablen de él... pues él puede sentarse a esperar a ver cómo van subiendo sus bonos; los demás, dizque sin querer, le dan su ayudadita.

Para que Peña Nieto tan siquiera sea alcanzado por Vázquez Mota y/o AMLO, tendría que divulgarse una grabación por teléfono donde salga diciendo que las mujeres mexicanas son bien feas, bigotonas y negras y que los hombres son unos huevones y dormilones buenos para nada hijos de la chingada y su p*** madre, sólo así Peña se pondría a todo el país en su contra, porque hay que recordar que cuando a los mexicanos nos dicen nuestras verdades nos ponemos como locos y queremos matar al que lo dijo. Pero de ahí en fuera ya no existe otra fórmula para bajarlo de la Luna, a menos a que alguién tenga preparado un as bajo el escritorio.

Pero el famoso Peña Nieto también es uno de los políticos más políticos, es decir, es el típico político que habla como robot, con el típico tono y con las típicas señas y saludos, el que cada vez que termina su discurso lo único que sabe decir es "gracias, gracias y gracias", apesar de todo éste monótono estilo, todos le creen. Cuando Peña Nieto está en sus discursos no expresa nada, no transmite nada, él está como en su papel; siempre habla igual y no hay nada novedoso en sus conferencias; ¿alguna vez lo hemos visto hablar y que se le note la siceridad en sus palabras? Sí, esa vez fue cuando dijo algunas palabras de agradecimiento en el funeral de su esposa, que por cierto éste funeral fue al puro estilo de Michael Jackson, donde hubo camarógrafos, fotógrafos y toda la cosa, hasta asientos en primera fila y demás. Ahí vimos al verdadero Peña Nieto. Y mejor ahí la dejamos.

Peña habla y da sus discuros como cualquier otro político que busca llegar a un mejor puesto, en éste caso la presidencia del país, pero ya que sea un candidato que exprese algo, para nada; podríamos decir que Peña Nieto es quién es por su fama mediática y todo lo que lo rodea, incluyendo, por su puesto, su vida privada personal suya de él.

Mientras las campañas de los candidatos, en gran parte, están basados en hablar mal y desacreditar a Peña Nieto, decir que es un méndigo mentiroso, el PRI y su candidato sólo tienen que ser pacientes, ser cuidadosos y esperar a que llegue la hora de la verdad. A menos que, como dijo el profeta Vicente Fox, ocurra un milagro y otro sea el presidente o presidenta y termine con la bestia Peña Nieto, el FC Barcelona de las elecciones.

"You may say I'm a dreamer, But I'm not the only one": AMLO
AMLO también tiene sus propuestas, él dice que acabará con los privilegios de los Gobiernos y sus políticos, quitándoles medio suelo y sus inmerecidos beneficios extra; él también abolirá la pobreza, la corrupción, la marginación, reactivará la economía; terminará con la inseguridad y hará de México un país chingón y desarrollado.

Si López Obrador llega a la presidencia y logra hacer eso... le cambiamos el nombre al país y le ponemos "AMLO". ¿Y cómo hará todo esto? con amor, lo que mueve al mundo y lo que nos mantiene vivos.

López Obrador, como todos, también promete acabar con la pobreza, el hambre y hacer de este país uno desarrollado, algo que nadie en más de 200 de historia ha hecho, pero él sí lo hará, porque él tiene la clave: el amor. AMLO dice, argumenta y pregona a los cuatro vientos que si llega a ser presidente del mundo de México, ahora sí habrá un cambio verdadero, curiosamente lo mismo dice Peña y hasta Josefina, ésta última bastante contradicente, porque habla del verdadero cambio refiriéndose a su partido, que alguien le diga que está en el mismo partido; de todo esto se ha quejado AMLO, a cada rato anda comentando que Peña se roba sus discuros, como si él y los políticos tuvieran discursos originales.

Pero todo esto lo ha hecho con una estrategia bastante bipolar, su campaña es bipolar; porque primero todo el país, toda la gente, ya sea sus seguidores u oponentes, adversarios, críticos o como quieran llamarlos, estamos (o estábamos) acostumbrados al AMLO que critica, que reclama, el de los escándalos contra el poder; el que inició una lucha insaciable contra la "mafia del poder", el que precisamente ganó tantos adeptos por eso, por ser rebelde e ir en contra de todos, por ser diferente o al menos intentar ser diferente (apesar de que hoy la palabra "diferente" haya adquirido otros matices). Pues ahora resulta que ese AMLO ya no existe, ahora ha surgido una versión más light, con su propuesta de "República amorosa" quiere llegar al poder de otra manera, el problema --por si lo no sabe él-- es que cambió de estrategia cuando menos tenía que hacerlo, porque primero nadie le cree, ni él mismo se la cree esto de que ahora soy "el amigo de todos" y el que va por todo el país dando amor, alegría y esperanzas.

Pero lo peor del caso no es esa falsa nueva imagen, con todo y sus spots donde sale con su hijo en su oficina pidiéndole perdón a todos aquellos que alguna vez perjudicó o hizo daño, sino que además todavía conserva la estrategia del 2006, donde regresa al viejo AMLO que todos conocemos, entonces, ¿ahora eres bueno o sigues siendo el mismo Andrés Manuel que está peleado con medio mundo? ya no entendemos; primero sales pidiendo perdón casi de rodillas pero al rato vuelves a lo de siempre.

Lo peor que pudo haber hecho es eso, cambiar, o intentar cambiar. Lo contraproducente de esto se ve reflejado en sus seguidores --esos paleros que los siguen a todas partes, quien sabe por qué--, ya que ni ellos se ven tan convecidos de la propuesta de su candidato e ídolo, porque eso de tener a un político que los defendía de los malos, ahora tienen a uno que quiere hacer las pases con los enemigos, y si a esos seguidores no los convence, imagínense a los que no son seguidores, es decir, los votantes del próximo 1 de julio. Así o más confunso y enredozo.

Cómo olvidar al Andrés Manuel de las campañas del 2006, el introvertido y polémico que hoy está convertido en un amoroso político. Por lo menos en las elecciones del 2006, a estas alturas, hiba en primer lugar, hoy no hay cómo pueda salir de ese mugroso tercer lugar.

Pero, AMLO, en su afán de salir de ese asqueroso tercer lugar y conseguir el poder, nuevamente ha comenzado a perder la razón, justo como en el 2006, cuando comenzó a decir sendas mentiras sobre todas las instituciones del país, primero aprovechándose de la ignorancia de sus seguidores --porque dichas personas son incapacez de crearse su propio criterio, como si de religiosos de tratasen--, y segundo de su talento para engañar y hacer creer que todo mundo es una mafia que está en su contra. En aquél año 2006, ya totalmente fuera de sí, salió a decir la tremenda estupides que el conteo rápido había sido alterado por un algorítmo de los procesadores, porque ahora resulta que es experto en informática, algo totalmente sin sentido.

En la recta final de estas elecciones 2012, también hizo lo mismo, comenzó con su campaña difamatoria, diciendo que todos son una bola de mentirosos y simpatizantes de Peña Nieto, al grado de decir que Televisa quiere imponer a Peña como presidente de México para tener más poder; si esto fuera cierto, ¿no se habría descubierto ya? Actualmente el periodismo es capaz de decifrar cualquier cosa, y no dudo que si existiera el proyecto "PRI-Televisa", algún periodista ya hubiera investigado y sacado a la luz el hilo negro. Esta absurda teoría ha hecho tanto ruido, que hasta el movimiento estudiantil llamado "Yo soy #132" --que dicho sea de paso, es igual de sospechoso que un político con 10 casas en todo el mundo-- lleva como bandera esta misma teoría, pero a la vez argumentado que no simpatizan con ningún partido político y que ni siquiera están a favor o en contra de ningún candidato y partido político, lo curioso del caso es que éste movimiento se caracteriza por tirarle a Peña Nieto y, por si fuera poco, apoyan el movimiento de AMLO, tanto que dicho movimiento estudiantil ya se ha fragmentado en dos ocasiones; un grupo se separó para formar uno propio, porque dicen que el movimiento original ya estaba adquiriendo fines políticos, y a otro lo sacaron del movimiento porque tenía contactos políticos. Un verdadero fraude lo de éste movimiento.

Pues los estudiantes (que no sé a qué hora estudian) de "Yo soy #132" se fueron a Televisa para protestar por dicho proyecto, el que tiene como fin poner a Peña Nieto en la presidencia; esta fue la primera aparición de dicho movimiento, donde lanzaron frases como "¡Fuera, Peña!", tal como en la Ibero, donde comenzó todo este chiste estudiantil. Sí, todas estas protestas, que son la base del movimiento, son puras teorías e hipótesis, es decir, suposiciones sin ningún tipo de fundamento y pruebas; ¿tienes pruebas de que Televisa quiere imponer a un presidente, en este caso Peña Nieto? Pues pon las pruebas en la mesa, papá. Eso de que "existe la hipótesis de que Televisa...", no, no, eso no sirve; si se trata de hacer teorías e hipótesis, pues al rato yo también puedo salir y formar mi propio movimiento en contra de la UEFA, porque sospecho y tengo una teoría y una hipótesis de que existe un contrato con la Selección de España y el Barcelona para ganar un montón de títulos, ¿es absurdo? Pues ahí están los videos que lo prueban, donde los árbitros "cometen errores", donde un jugador "se deja anotar gol", etc. Porque a mí no se me hace normal que un país gane tanto en lo deportivo.

Lo del "Yo soy #132" está llenó de sospechas, tanto que dicen que el que está detrás de todo esto, es el propio AMLO, lo cual no sería nada raro, ya que los ideales parecen ser los mismos y mucho menos a nadie le sorprenderia que AMLO esté jugando sucio.

Lo de Televisa y el PRI no parece tener sentido, además, si han visto y escuchado, las supuestas pruebas que AMLO presenta acerca de este proyecto de Televisa, son realmente de risa, porque saca unas tablas donde dice que Televisa habla más de Peña que de él, o que Peña firmó contratos millonarios con Televisa, y muestra algunas "pruebas", que por cierto, son "pruebas" que sólo él ve, porque nadie más las ha visto, ¿y porque no sube a su página dichas pruebas para que todos las veamos? ¿o también desconfía de su propia página web y un posible algorítmo priista?

A López Obrador se le ha comparado con Hugo Chávez, otro desquiciado con tendencia de dictador, y no es para menos, ya que comparten muchas características, una de ellas es su famosa intolerancia y autoritarismo. Para AMLO, un fraude electoral es aquel donde él no resulte ganador, es decir, si él pierde habrá fraude, un fraude que ha estado gestándose por mucho tiempo, pero si gana, todo habrá sido limpio, honesto y transparente; y luego por qué decimos que se aprovecha de la ignorancia de las personas. Además, Andrés Manuel dice y asegura que las encuestadoras que ponen a Peña Nieto en primer lugar están amañadas, corrompidas. Y como ejemplo pone sus propias encuestas hechas por él mismo; esas encuestas lo colocan en primer lugar, hasta por 5 puntos arriba de Enrique Peña Nieto. La pregunta sería, ¿si el 98% de las encuestas dicen que el PRI está en primer lugar, eso quiere decir que todas estas casas encuestadoras, periódicos y medios de comunicación (quienes hacen dichas encuentas) están sobornadas y compradas por Peña Nieto y el PRI? La respuesta que nos da AMLO, es: Sí.

Con López Obrador no se puede discutir, porque todo lo que digas en su contra será falso, todo lo que digas a favor de otro candidato que no sea él, será falso, porque él siempre tiene la razón, y la única verdad es la que sale de su boca. Tomando en cuenta estos ideales, para AMLO en México no existen instituciones honestas, no existen periodistas profesionales, ya que todos están corrompidos por el PRI; todas esas encuestas que lo ponen abajo de Peña, trabajan para el PRI. A López Obrador no le importa el nombre o la historia de una empresa o personas, él pasa por encima de ella sin importar si tiene pruebas o no de lo que dice; AMLO quiere llegar a la presidencia pasando por encima de los demás, pasando por encima de nombres y personas, si pensar en los demás, sólo pensando en él, escudándose en nombre del pueblo y ese patrioterismo que en todas partes pregona. ¿Así quiere ser presidente? ¿difamando a los demás?

La UNAM argumentó que en las elecciones del 01 de julio, es imposible que haya fraude. Nada más falta que AMLO también diga que la UNAM simpatiza con Peña y el PRI, y que todos, incluyendo los catedráticos, han sido comprados por dicho partido y que no valen nada.

Ese es Andrés Manuel López Obrador, un paranoico con aspiraciones presidenciales.

Josefina Vázquez Mota y el Mago Merlín
La que también promete un nuevo país de color rosa en menos de 6 años es la famosa Pina, la única mujer que como arma para estas campañas tiene eso, el ser mujer, porque otra cosa no tiene.

Vázquez Mota es una de las candidatas que más ha sufrido, y no tanto por sus rivales en las elecciones, sino por su propia gente del PAN, un partido con una estructura que desde un principio ha mostrado debilidades tras debilidades, que por cierto, en éste equipo de Vázquez Mota hay cada personaje que pa' qué les cuento, como Jorge Camacho, uno de sus coordinadores, que si lo recuerdan, era uno de los patiños de Brozo en su programa El Mañanero, qué cosas. Desde la contienda interna del PAN hasta la fecha, hemos visto cómo nuestra adorada Josa va trompezando, y además con tacones; soltando una que otra puntada que sólo ella entiende y que los demás no, como cuando fue a la ITAM y dijo: "Yo estudié en la escuela pública hasta la vocacional del Politécnico. Y bueno, como nadie es perfecto, me fui a estudiar Economía a la Ibero", claro, lo dijo de broma, haciendo un giño que nadie vio, lo cual encendió a los alumnos de la Ibero --esos alumnos que, al parecer, hacer de todo, menos estudiar--. Al final, tuvo que aclarar todo, cuando ya todo mundo le había dicho de todo y pensado todo tipo de cosas.

Josefina es un caso curioso, porque, así como toooooodos los políticos y candidatos, ella tiene otra personalidad; por ahí se esconde una Josefina rebelde, con carácter, furiosa y con un vocabulario digno para formar parte de Molotov. Si Vázquez Mota hablara y se expresara, y además mostrara ese lado, su lado verdadero, en sus campañas, la cosa sería sí diferente, tal como el eslogan de su campaña.

Cómo olvidar las famosas grabaciones telefónicas donde se le puede escuchar a Mota expresándose de sus colegas de forma no tan diplomática. Como a Ernesto Cordero, que al estilo de Paquita la del Barrio, se refirió a él como "patán" y lo acusó de utilizar estrategias "rastreras", por poco y no le dice escoria de la vida. Pero qué me dicen de la ya memorable frase "pinche Sota", que fue el tema en Twitter: #PincheSota, #JosefinaMentirosa, #JosefinaMolotov, etc. Mota se refería a Alejandra Sota, quien es la Vocera de la Presidencia, a quien, como pudimos darnos cuenta, no la considera su BBF, como a Elba Esther Gordillo, ya que además de decirle pinche, también le dijo chismosa, esto por el hecho de que Vázquez Mota acusaba, en dichas grabaciones, a Sota y Genaro García Luna de grabar sus conversaciones. Después de este hecho, salieron rápidamente a tratar de arreglar los platos rotos, el equipo Team Vázquez Mota Raw presentó denuncias por las escuchas telefónicas, y afirmaron que había una guerra sucia contra la candidata. Qué tal, el burro hablando de orejas. Y también, lo peor que Mota pudo haber hecho fue haberse deslindado del hecho desde un prinicipio, ya que en el programa de Noticias de MVS, que conduce la anorgásmica Carmen Aristegui, le preguntaton sobre el tema, el cual ella evadió rotundamente.

El PAN, al igual que el PRD, basaron sus campañas en desprestigiar a Peña Nieto (sí, toda la campaña trató sobre Peña Nieto), y Vázques Mota no escatimó recursos haciendo y diciendo que Enrique era lo peor que podría sucederle al país, todo esto con los famosos spots, donde mostraba supuestos compromisos incumplidos de Peña, además de que en sus mítines siempre hacía referencia de Peña Nieto, y por supuesto en el primer debate no dejó escapar la ocasión para intentar despeinar al candidato del PRI. Y apesar de que las descalificaciones eran a diestra y siniestra, Peña ni se despeinó, al contrario, los que vieron como bajaban sus bonos eran los del PAN y el PRD.

Antes de todo esto, dentro de tantos tropiezos que tuvo, ocurrió un resbalón de aquéllos, cuando en una reunión con gente sin qué hacer simpatizantes en la Plaza de Toros México, llegó como 142 horas tarde, y cuando arrivó a dicha Plaza, ya todos estaban buscando la salida, y es que habían esperado por horas, la imagen de Josefina hablando con una Plaza semivacía y con la gente abandonando el lugar, dio lástima y pena jena, sin duda, fue uno de los peores momentos para cualquier candidato, y le tocó a Josefina, ya ni Gabriel Quadri sufre esos desaires. Porque a las reuniones de Quadri no va ni su mamá.

Luego, nuestra Chepina mejor se dedicó a hacer una campaña de verdad, aunque sin mucho punch, ya que tuvo momentos de gloria, pero al final de las campañas, donde comenzó a subir un poco, algo que difícilmente le ayudará para desbancar a Peña, el rival a vencer.

Gabriel Quadri, el mejor
Lo del candidato del partido Nueva Alianza es único, un político --que se dice ser intelectual, al menos el look de mestro de ciencias naturales ya lo tiene-- y candidato que en muchas etapas de su campaña ha hecho muchos ridículos y que demás los medios de comunicación ya lo agarron de su patiño; un candidato seco, sin ningún futuro y que toda su campaña ha pasado desapercivida.

Algo que nadie comenta, porque seguramente Quadri les cae mal o algo por estilo, es el que mejor propuestas tiene. Quadri, primero, no promete nada, porque no es ningún mago, ilusionista o persona con superpoderes, es quien mejor explica las cosas, no habla y engaña a la gente con este lengüaje confuso y mareador; el candidato de Nueva Alianza asegura que las cosas que el propone se podrían lograr (y aclara que se "podrían", porque no asegura nada) a largo plazo, y con resultados efectivos si es que la gente también pone de su parte. Y esto es importante, ya que los demás candidatos aseguran que harán posible todo lo que prometen sin ayuda de nadie, sólo ellos, es decir, la gente sólo tiene que esperar sentados a ver cómo el país se convierte en uno realmente desarrollado.

Gabriel Quadri es realista, sabe que las cosas se consiguen en años, así que lo único que podemos hacer es mejorarlo un poquito, algo que los otros no dicen, sino que aseguran que el país cambiará totalmente en un dos por tres. El problema de Quadri es todo lo que está detrás de él, que es la familia de Jabba The Hutt (también conocida como Elba Esther Gordillo), quienes halan de los hilos del PANAL para simplemente adjudicarse más cargos políticos, aunque Quadri diga que no conoce a Gordillo y que sólo la ha visto una vez en su vida, ese partido lleva como bandera principal el nepotismo, además de que el poder es el único fin.

Obviamente no es lo único negativo de Quadri, a todo esto, el bigotón tuvo que lidiar con la poca importancia y seriedad que los medios, y por consecuencia, la gente, le dio a su campaña; nadie se tomó en serio a Gabriel Quadri, todos lo hacían menos, y ni siquiera para resaltar sus excelentes propuestas. Además, la fama mediática de Peña y Mota lo opacaron completamente, ya que de él sólo se hablaba por el simple hecho de que era candidato, que por cierto, no era político, sino un ciudadado compitiendo por la presidencia, uno que está encabronado y hasta la madre de la situación actual del país. Un ciudadano villamelón, eso sí, ya que a cada rato andaba pregonando sus estudios y viajes por todo el mundo.

De entre todos, el menos actuado es Quadri, aunque éste último, como decíamos, carece de tanta popularidad que aunque salga a decir que es gay o que le gustan los niños, nadie le hará caso; está pero no está. Una lástima que alguien con tan buenas propuestas y aterrizado haya caído en manos de un partido negro como el PANAL.

Estos, los cuatro personajes que quieren el título de Presidente de México, carecen de muchas cosas, entre ellas, la más importante, es la verdad; si ni ellos mismos se creen sus propias palabras, ¿qué nos espera en el próximo sexenio? una presidenta anticuada que se enoja con todo el mundo y le dice de groserías, un presidente que se dedicará a derrocar a sus enemigos, un presidente que no sabe cual es el salario mínino de los mexicanos, o uno que no tiene ni oportunidad de salir del cuarto lugar en el que está.

Todo prometen lo mismo, un país nuevo y desarrollado, pero lo chistoso del caso es que nunca nos han dicho cómo harán eso; ¿cuándo nos dirán qué truco utilizarán para cambiar al país y hacer de él uno nuevo y diferente, un país con un "cambio" verdadero?. Cómo harán para cumplir todo eso que prometen y aseguran; terminar con la pobreza, la inseguridad, hacer crecer la economía, erradicar la desigualdad y hacer de México otro país, eso no lo sabemos, porque nunca nos lo dijeron, a menos que cuando ya estén sentados en la Silla nos digan de una vez por todas.

La conclusión de estas elecciones sería que, además de que fueron vacías porque no nos ofrecieron nada, se trataron de las elecciones de Peña Nieto y el suspenso de saber si se mantendría en el primer lugar, y cómo sus tres contrincantes se dedicaron a darle publicidad de forma indirecta y directa; porque las campañas de los oponentes de Peña Nieto (más del lado de JVM y AMLO) tuvieron como base el derrocar al candidato del PRI, desprestigiar al candidato del PRI e ir siempre en contra del candidato del PRI, ya sea en sus discursos, conferencias o spots, dando por sentado que el Presidente de México será Enrique Peña Nieto y que estas elecciones sólo sirven para intentar evitar que eso suceda.

Si en más de 200 años de historia, el país ha vivido sumergido en la pobreza, la desigualdad, la violencia; la marginación, entre otras muchas cosas más, no puede ser posible que va a llegar un Presidente(a) para terminar con todo y hacer de México un paraíso. El país, así de directo lo digo, no tiene solución.