'Trapitos al sol' en el Super Bowl XLVII

La necesidad de vender y obtener rating a como dé lugar, todo para que la gente vea el evento televisivo más importante del mes (o del año), hacen que las televisoras pierdan la razón y pongan a ventilar hasta la vida privada de sus empleados para promocionar dichos eventos.

Si Televisa Deportes a cada rato se encarga de ridiculizar a sus comentaristas deportivos poniéndolos a actuar, bailar y otras cosas que evidentemente no saben hacer, todo para vendernos eventos deportivos como el Super Bowl, ¿Por qué TV Azteca no hiba a hacer lo mismo? Y peor aún, ¿Por qué no hiba a ir más allá y se pondría a vendernos la transmisión del Super Bowl a costas de la vida personal de sus propios empleados? Y es que TV Azteca también tenía que salir a hacer más o menos lo mismo, pero muy a su manera.

A una semana del Super Bowl 47 (26/01/13) --evento que se transmite en televisión abierta en México por Televisa y TV Azteca, y que ESPN, Fox Sports y NFL Network lo hacen en tele de paga, y quien sabe en cuántos canales más--, las televisoras más "importantes" del país continúan llenándonos las pantallas con promocionales sobre el Super Bowl XLVII, evento 100% gringo que al resto del mundo nos encanta idolatrar porque nos gusta lamerle los pies a los yanquis, pero ese no es el tema, el punto es que tanto Televisa como TV Azteca se han apurado, como cada año, a hacer comerciales, campañas y promocionales acerca del SB, donde los protagonistas son los comentaristas, y no los equipos o el SB mismo.

Por ejemplo, Televisa, que le encanta poner en ridículo a sus comentaristas, nos sale con lo mismo de siempre: ponen a bailar a Antonio de Valdéz, Enrique Burak, José Segarra y algunas de las llamadas Chicas TD, pero no sólo a bailar, sino a cantar y actuar. No sé cuál es el afán de Televisa Deportes en querer utilizar a sus comentaristas como personas con talento para todo, cuando en realidad no son más que simples comentaristas que se hacen los chistocitos, y que no lo único que saben hacer bien es comentar eventos deportivos.

Son comentaristas de deportes, no artistas polifacéticos; en los promocionales se ven ridículos y estúpidos. Una cosa es que te hagas el chistocito en los programas de televisión y otras cosa es que creas que eres chistocito para salir haciendo circo, marona y teatro en promocionales.

Esto en cuanto a los súper creativos de Televisa Deportes, pero en Azteca Deportes... Que alguién me diga qué demonios significan los promocionales que han sacado en este 2013 para promocionar el Super Bowl, porque son más raros que cualquier película de Andy Warhol; no tienen sentido alguno, el contexto que nos muestran es una y el mensaje es otra, están totalmente perdidos. "Lo único que no te puedes perder es el Super Bowl", dice el promocional de TV Azteca, pero es una frase absurda cuando ya viste el contenido del comercial.

Pero a TV Azteca siempre le ha gustado caer bajo, y lo sigue haciendo, y esta vez vaya que lo ha hecho.

Azteca tiene el programa llamado Historias engarzadas, un programa de espectáculos con formato dizque documental de televisión. En realidad es un programa de reportajes que le imprimen drama, intriga y chisme, nada más. Pues en éste programa, una semana antes del Super Bowl, se les ocurrió la brillantísima idea de transmitir las "historias engarzadas" de la vida profesional y personal de Enrique Garay, comentarista deportivo de esa empresa y que se especializa en el futbol americano. Y aquí es donde sale a relucir la moral de la televisión mexicana: Azteca Deportes, con una retorcida idea de ganar público para el Super Bowl, pone y exhibe a su comentarista referente para que con sus historias sobre sus comienzos y vida privada, se encarge de vender el Super Bowl 47.

Así de bajo son capaces de llegar las televisoras, con tal de vender se valen del morbo, de los chismes y la vida de otros para promocionar y ganar audiencia; para ganar rating, ¿A éste nivel hemos llegado?

El programa de Historias engarzadas sobre Enrique Garay no fue más que una propaganda ridícula, pretenciosa y tremendamente morbosa sobre el Super Bowl 47. Y por lo menos hubieran sabido desimularlo, pero no, porque todavía, casi al final del programa, mencionan el Super Bowl 47 con todo y fecha de transmición en Azteca Siete, diciéndonos que ahí estará Enrique Garay, el mismo que ahora nos está contando sus historias personales, ¡Así de bajo hemos caído!

Además, ¿Quién demonios es Enrique Garay? A nadie, a ningúna persona le interesa la vida de Enrique Garay, es un desconocido y aburrido personaje; ¿Qué nos puede interesar la vida de éste periodista que no es periodista? Nada, no nos interesa nada.

El pobre Enrique Garay, que contó sus inicios como comentarista, además de su relación amorosa con Lilina Lago --el cual se le hizo más enfásis y en el cual giró este programa--, nomás lo utilizaron como producto, como cartel publicitario para vender el Super Bowl en donde él será el anfitrión.

TV Azteca, pensó: "Voy a hablar sobre la vida de Enrique Garay para que la gente morbosa y prejuiciosa lo vea el 3 de febrero en el Super Bowl". Qué bajo, qué pobre, qué bulgar y qué ruín es la forma de hacer televisión en México. Esto es lo que tenemos, hasta qué niveles hemos llegado; parece que ahora lo más importante es vender, no importa si en medio está la vida privada de otros.

Hay razones para ver el Super Bowl 47, pero la vida de Enrique Garay no es una de ellas.