"El funcionamiento del equipo fue sensacional. El equipo fue muy redondo en todos los sentidos": Miguel Herrra engañándose a él mismo y engañando a todo el país.
Todos felices y contentos, satisfechos y extasiados por el triunfo contundente y aplastante de la Selección Mexicana sobre Nueva Zelanda, en el repechaje rumbo al Mundial de Brasil 2014, como si en realidad México hubiera conseguido el triunfo por méritos propios.
Todo es fiesta, todo es alegría; la crisis tricolor ya pasó, de hecho, nunca existió. Las goleadas ahn regresado, y México está calificado al Mundial --nadie sabe a qué va a ir al Mundial, pero está calificado--.
FIFA, si quieres tener un Mundial más competitivo y llamativo, ¡Haz que desaparezca el repechaje! ¿Cuál es la necesidad de premiar la mediocridad? Con equipos y partidos como estos, tenemos mundiales como el de Sudáfrica 2010.
Partido de trámite
Pues como ya todos saben, México consiguió su pase al Mundial de Brasil 2014, y lo hizo sin ganarle a nadie, pero ya todos están hablando sobre el dizque buen funcionamiento del equipo mexicano ante los neozelandeses, como si Nueva Zelanda en verdad fuera un equipo con nivel futbolístico.
¿Y qué otro resultado esperaban? Desde mucho antes lo estuvimos diciendo, Nueva Zelanda no juega a nada, no tiene nivel futbolístico, es un equipo semiprofesional, es mucho peor que un equipo concacafquiano --peor que Jamaica--.
Pero aún así, el pueblo mexicano ya siente que tiene equipo para competir en el Mundial (?). Primero, hay que analizar contra quién se jugó, y luego cómo se jugó y cómo se ganó.
Antes, no hay que olvidar que México está jugando el repechaje, es decir, el Tricolor está consiguiendo su pase al Mundial desde lo más profundo del abismo; no hay que olvidar cómo se llegó hasta estas instancias: con patéticas decisiones de los directivos, dueños y demás, con entrenadores esquizofrénicos y con jugadores con complejos de faraones.
No hay que olvidar que México vive una crisis futbolística, y no hay que olvidar que México todavía no está jugando a nada y no ha mejorado nada. No hay que olvidar que México no tiene equipo de futbol.
Desde un principio se sabía que este iba a ser un juego de trámite, pero como ya es costumbre, los medios se encargaron de engrandecer a Nueva Zelanda, diciéndonos que era un equipo peligrosísimo por arriba y no sé qué más, cuando en realidad ni siquiera saben jugar al futbol.
El argumento de los medios sobre el "peligro" de Nueva Zelanda se basaba en lo que el equipo oceánico había hecho en Sudáfrica 2010 (donde empató sus tres partidos de Fase de Grupos), sí, hace tres años; México no iba a jugar con aquel equipo de hace tres, iba a jugar con un equipo neozelandés en repechaje en este 2013. Es decir, si México llegó al repechaje fue por la crisis que vive, pero si NZ de por sí es un chiste, imagínense cómo ha de estar para estar jugando un repechaje.
Por supuesto, el desconocimiento del futbol neozelandés pesó bastante, pues muchos andaban diciendo que no había que menospreciar al equipo kiwi, por favor.
En realidad no sabemos cómo calificar la actuación del equipo mexicano, pues sin un rival enfrente, es difícil sacar una conclusión sobre el futbol mostrado por parte del equipo verde, pues el funcionamiento de un equipo, en un partido tan desequilibrado como este, no es muy claro que digamos. Y en ocasiones suele ser confuso.
Si México fue agresivo, ambicioso, y si mostró una actitud diferente y propositiva, fue gracias al pobre/nulo rendimiento del rival, no tanto por el gran arrojo del conjunto mexicano.
El partido fue completamente dominado por México, mientras que Nueva Zelanda ni sabía a lo que jugaba; ellos salieron a la cancha del Azteca a defender y a intentar buscar un pelotazo, aunado a un inocente funcionamiento. Además, el nivel técnico de la mayoría es deprorable, no por nada son jugadores amateurs.
Sí, México fue contundente (dentro de la mediocridad del partido) e infinitamente superior al contrincante, pero porque el contrincante no traía prácticamente nada. NZ ni atacó ni defendió y ni hizo nada para detener el vendaval tricolor; fue un simple observador más (junto con los casi 150 mil aficionados que no tenían nada qué hacer en horas de trabajo [igual que yo] que llenaron el estadio).
Entonces, en un partido tremendamente disparejo, es complicado analizar el funcionamiento del equipo mexicano; no sabemos en realidad cuál es el verdadero alcance de esta Selección Mexicana. Lo hizo bien, fue al frente, buscó el partido, pero con el consentimiento del equipo visitante. Yo me pregunto cuál hubiera sido el resultado si en lugar de NZ el rival hubiera sido otro con más capacidad futbolística.
Los goles de Aguilar, Jiménez, Peralta y Márquez reflejan, no el funcionamiento del equipo mexicano, sino el nivel de partido que le tocó jugar a México. Además, el único gol de Nueva Zelanda (James, al 84'), se da en un error de la defensa mexicana, y eso que los kiwis no son nadie al frente.
En pocas palabras, a Nueva Zelanda lo golean hasta las Chivas; Panamá le mete más goles, y hasta Jamaica le gana contundentemente.
El equipo mexicano fue superior, aprovechó las vastas debilidades del rival, y lo ganó bien, pero no hay que confundir, que México haya ganado por goleada no significa que ya todo se ha aclarado. También hubo muchas fallas, que pudieron haberle dado más ventaja en el marcador al conjunto tricolor.
Y ni qué decir del arbitraje, que fue medio localista; al inicio, una entrada criminal de Rodríquez que pudo haber sido hasta de roja. Luego, un penal de Rafa Márquez que Viktor Kassai no marca. Aunque ni con 9 hombres Nueva Zelanda hubiera conseguido algo en el partido.
Lo más importante fue haber conseguido el pase --porque ya el partido de vuelta se puede ganar con el mismo marcador--, pero la gran interrogante es: ¿Y ahora qué sigue? México está en el Mundial, pero ¿a qué va? ¿A ser más humillado? ¿A ser el peor equipo del Mundial? ¿A qué va México al Mundial?
Hay que decir que México está en el Mundial gracias a Estados Unidos, y ahora podríamos decir que gracias también a Nueva Zelanda. La cuestión aquí es el equipo que irá al Mundial; primero, con este equipo, más los "europeos" --que sí van a ir "europeos" al Mundial--, México no va ni a meter las manos.
Segundo, hay muchos jugadores que no son de Selección --comenzando con Luis Montes, que no sabe jugar futbol, muchos dicen que hizo bien su trabajo, para mí no, para mí fue un desastre--, y los que sí son, tampoco son la gran cosa. Entonces, ya con el equipo hecho, ¿a qué va México al Mundial? Además, Herrera tendrá seis meses para intentar mejorar y preparar al equipo rumbo a la cita mundialista. No, así no se puede.
El sólo hecho de estar jugando un repechaje, ya es un fracaso, ir al Mundial con un equipo de la liga local a participar y a hacer el ridículo, ya es la cereza en el pastel.
Con este equipo, más los agregados, México podría quedar de pie en el Mundial, pero nada más.
Fotos | Mexsports
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