El Club Querétaro ha avanzado a las Semifinales del futbol mexicano, derrotando a las poderosísimas Chivas del Guadalajara; con mucho corazón, inspiración y gallardía, Los Gallos Blancos están con los ánimos por las nubes y ahora van contra los Tigres, un equipo sólido y contundente al ataque, que les exigirá más, mucho más que "El Rebaño Sangrando".
Querétaro tuvo enfrente a un equipo que hiba en picada, ya que en los dos partidos de Cuartos de Final, el equipo más popular de México, las Chivas, no fueron ni la sombra del Torneo regular, que los llevó al Superliderato (que una vez más queda comprobado que el liderato no es más que una simple tabla para definir posiciones y nada más).
En el partido de ida, Chivas dejó de hacer muchas de esas cosas que los llevó a tener un Torneo aceptable, entre ellas, los delanteros ya no pesaron como antes, tal es el caso de Erick Torres (el famoso "Cubo"), Enriquez, "El Venado" Medina y Marco Fabián que se nos lesionó --está lesión fue a causa de un golpe que le dio Nayeli Rangel, cuando estos dos se encontraban "jugando a los penales"-- y no pudo estar presente en La Corregidora. Todo esto aunado a la atmósfera que se formó entorno al equipo queretano, la pasión desbordada de la afición y el buen momento de sus jugadores, entre ellos el principal motor del equipo, el charrúa Carlos Bueno.
Para el partido de vuelta, en donde no se llenó el estadio (qué raro), Chivas fue dueño de todo, pero simplemente no fue la noche de sus jugadores que nunca la metieron; pero si fue la noche, el dia y la mañana para Liborio "Mis papás de odian" Sánchez, que tuvo un partido de ensueño, mágico y sublime, atajando hasta los escupitajos de sus compañeros chivistas, por que aún pertenece al chiverío. Sí Liborio, sí... gracias a ti el Querétaro está en Semis. Está más que claro que Chivas, en este partido, tuvo mucho tiempo la pelota, pero la menejaba de manera torpe; no supo crear jugadas elaboradas e inteligentes que terminaran en gol, todo era a lo loco, además de que dio uno de sus peores encuentros.
Mientras que el Gallo fue a lo que hiba: a cuidar el marcador.
Querétaro tuvo enfrente a un equipo que hiba en picada, ya que en los dos partidos de Cuartos de Final, el equipo más popular de México, las Chivas, no fueron ni la sombra del Torneo regular, que los llevó al Superliderato (que una vez más queda comprobado que el liderato no es más que una simple tabla para definir posiciones y nada más).
En el partido de ida, Chivas dejó de hacer muchas de esas cosas que los llevó a tener un Torneo aceptable, entre ellas, los delanteros ya no pesaron como antes, tal es el caso de Erick Torres (el famoso "Cubo"), Enriquez, "El Venado" Medina y Marco Fabián que se nos lesionó --está lesión fue a causa de un golpe que le dio Nayeli Rangel, cuando estos dos se encontraban "jugando a los penales"-- y no pudo estar presente en La Corregidora. Todo esto aunado a la atmósfera que se formó entorno al equipo queretano, la pasión desbordada de la afición y el buen momento de sus jugadores, entre ellos el principal motor del equipo, el charrúa Carlos Bueno.
Para el partido de vuelta, en donde no se llenó el estadio (qué raro), Chivas fue dueño de todo, pero simplemente no fue la noche de sus jugadores que nunca la metieron; pero si fue la noche, el dia y la mañana para Liborio "Mis papás de odian" Sánchez, que tuvo un partido de ensueño, mágico y sublime, atajando hasta los escupitajos de sus compañeros chivistas, por que aún pertenece al chiverío. Sí Liborio, sí... gracias a ti el Querétaro está en Semis. Está más que claro que Chivas, en este partido, tuvo mucho tiempo la pelota, pero la menejaba de manera torpe; no supo crear jugadas elaboradas e inteligentes que terminaran en gol, todo era a lo loco, además de que dio uno de sus peores encuentros.
Mientras que el Gallo fue a lo que hiba: a cuidar el marcador.
Ahora Querétaro tendrá, en teoría, el rival más complicado: Tigres. Ya que el equipo felino le pasó por encima al Pachuca, claro, el Querétaro no es el Pachuca, y Chivas no es Tigres, ante esta lógica cualquier cosa puede suceder; Los Gallos, como en 4tos., tienen que definir todo en casa, a tratar de matar de local, por que de visita será casi imposible, y es que Tigres parece ser mucho más equipo que Querétaro. Y también hay que ver cuánto les durará a los queretanos esta estrategia de "anoto un dos goles en casa y a sufrir 90 minutos de visitante".
Ahí están Los Gallos Blancos, escribiendo su historia en los libros sagrados del futbol mexicano.
Sólo espermos que ambos partidos sean agradables, por que después de lo que vimos en el 70% de los partidos de Cuartos de Final... y si le sumamos que algunos comentaristas nomás se dedican a aburrir más los partidos, pues estamos acabados.
Los Gallos Blancos siguen haciendo historia
Reviewed by José L. Bravo
on
7:57 p.m.
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