Porque los Mayas me lo dijeron

Que si el mundo se va acabar, que si algún día me has de querer te debes apresurar, y un montón de incoherencias más, típico de nuestra sociedad infantil e ingenua que se cree todas las sartas de ridiculeces de las distintas propagandas que andan aprovechándose por ahí.

Desde hace un tiempo, se viene hablando sobre las famosas "Profecías mayas", las cuales, según la gente, aseguran que el fin del mundo, el fin de los tiempos tendrá lugar el próximo 21/23 de diciembre de 2012.

Lo curioso de todo, es que nadie sabe en dónde o en qué parte se encuentra dicha profecía, ya que todo éste revuelo se basa en la imaginación crédula de las personas que, a como de lugar, quieren creer en algo, por absurdo que sea; afortunadamente tenemos a los científicos que, desperdiciando su valioso tiempo en tremenda tontería, han salido a aclararles a esas personas la verdad sobre la "profecía" que los mayas nunca dijeron.

Hablar sobre éste tema es estúpido, pero, como no hay otra forma de explicarnos, tenemos que adentrarnos en él. En realidad, los mayas no predijeron nada, simplemente ellos dejaron grabados para la historia parte de sus creencias; dentro de la mitología maya, existían ciclos, lo cuales tenían un principio y un fin. De hecho, arquéologos afirman no tener ningún registro de ningún tipo de que los mayas creyesen que el mundo llegaría a su fin en el 2012 o cualquier otra fecha.

Todo es producto de las malas y pésimas interpretaciones, de las grandes empresas que han hecho de la cultura maya todo un circo, todo un negocio; charlatanes y religiosos también han encontrado en el 21 de diciembre una mina de oro para sobresalir y seguir con sus chantajes.

Además, esto nos prueba que las sociedades son realmente estúpidas y fáciles de manipular, ya que toda la mercadotécnica que se ha creado al rededor del tema, pudo haber quedado como eso, siemples productos de consumo (películas, documentales, series, libros, etc.), pero la gente, en su pensamiento tan cerrado e influenciado por la religión --por sí algo faltara--, se ha creído todo el chistecito del cual hasta los mayas se han de estar revolcando de risa en sus sagradas tumbas.

Se tiende a creer y pensar que las culturas antiguas tenían conocimientos más avanzados que la civilización actual, y que además estaban dotados de una capacidad mística para revelarnos cosas sobre el futuro del mundo y del Universo. Pero son cosas que nosotros no podríamos deducir porque son cosas estúpidas y sin sentido, como la idea del fin del mundo.

El 21, 22, 23, 24, etc., de diciembre será como cualquier otro día, como cualquier otra fecha de cualquier otro año, a menos que se hayan despojado totalmente de su cordura y razonamiento, pues dichas "Profecías mayas" parecen estar creadas para aquellas personas que aún viven en la edad de piedra.

Carentes de cualquier tipo de credibilidad y de sentido, una idea creada por los medios masivos y por Hollywood, las "Profecías mayas" no son más que otro producto comercial de las sociedades modernas que se dejan llevar demasiado por la mercadotécnia que rodea nuestras vidas.

Todo comenzó por querer encontrar e interpretar el fin del mundo en piedras, jeroglífico y otras escrituras mayas, a como diera lugar; y como dicen por ahí, el que busca encuentra. Y aquí estamos, esperando a que se revele un enigma que nosotros mismos inventamos.

Sí, el mundo sí se puede acabar, pero sólo si nosotros hacemos que se acabe.