Michael Persinger, neurólogo, ha recogido de sus pacientes con epilepsia temporal, relatos de alucinaciones de tipo religioso. Dos de los relatos frecuentemente aludidos son los de Rudi Affolter y de Gwen Tihe, ambos padecían epilepsia temporal. Rudi Affolter es ateo y cuenta que experimenta alucinaciones como si realmente se estuviera muriendo. Gwen Tihe es cristiana y la alucinación que padece es que da a luz a Jesucristo.
Algunos han querido reproducir experimentalmente estas auras epilépticas mediante estimulación de la corteza temporal. Michael Persinger lo hacía con un campo magnético de débil intensidad y los sujetos de experimentación referían que notaban como si en la habitación en que se encontraban hubiera algún "ser no corporal", experimentaban a veces una iluminación repentina, o temor espiritual, pérdida de la noción de tiempo, etc. Por su parte, un investigador suizo, lo hacía mediante "electric zaps" a la altura del gyrus angularis, aplicados a una epiléptica, ésta experimentaba la sensación de "fuera del cuerpo".
Si la epilepsia temporal produce experiencias religiosas, algunos autores han pensado que las experiencias místicas de ciertos santos, como San Pablo, Juana de Arco, Santa Teresa de Jesús, etc., y hasta el mismo Jesús de Nazareth (si es que en realidad existió), posiblemente fueron provocadas por un "pequeño mal" (ataques epilépticos débiles), es decir que lo que se atribuye a una unión mística con dios se reduce a una ACTIVIDAD PATOLÓGICA DE LA CORTEZA CEREBRAL.
Se cita el caso de Ellen White (nacida en 1827), quien a la edad de 9 años padeció un traumatismo craneoencefálico, que provocó un cambio de su personalidad y comenzó a tener visiones religiosas. Éstas le llevaron a fundar el Movimiento Adventista del Séptimo Dia (para que vean lo que es el poder de la mente).
El momento en que una persona creyente se siente en comunión con dios, o con una entidad superior, fue estudiada por Newberg y D’Aquili. Lo que descubrieron es que la mayoría de los sujetos experimentales --cuando no están meditando-- muestran el Área de Asociación de la Orientación mucho más activa que cuando meditan. Es decir, son capaces de concentrarse con tanta profundidad que ya no perciben los estímulos sensoriales externos. Según los investigadores, al no recibir información sensorial, el área de asociación de la orientación se vuelve incapaz de determinar los límites del individuo, y eso sería lo que provoca que el meditador perciba sensaciones relacionadas con "dios", el "infinito" o de "unidad con el Universo".
Uffe Schjødt estudió las reacciones cerebrales, mediante el análisis cerebral por resonancia magnética funcional (fMRI), en un total de 20 pentecostalistas y de otras 20 personas no creyentes, durante la escucha por parte de todos los participantes, de sermones religiosos grabados.
A todos los voluntarios se les dijo que seis de las oraciones grabadas habían sido leídas por personas no cristianas, otras seis por cristianos corrientes y las otras seis por un sanador. En realidad, todas ellas habían sido leídas por cristianos de a pie --esas personas sin que hacer que van de casa en casa--. Los científicos constataron que sólo en el caso de los voluntarios devotos se produjeron cambios en la actividad cerebral registrada, como respuesta a los sermones oídos. Concretamente, en este grupo la actividad neuronal se redujo en partes de la corteza prefrontal y de la corteza cingulada anterior del hemisferio izquierdo del cerebro, que son áreas que juegan un papel clave en el estado de vigilancia y de escepticismo en situaciones en las que estamos juzgando la verdad y la importancia de lo que la gente nos dice. Asimismo, se vio reducida la actividad del área de asociación de la orientación, reafirmando lo planteado por Newberg. También se observó, en los creyentes, actividad neural adicional en lo que se considera el "área de la fe", en el lóbulo prefrontal derecho, que no presentaron los que se declararon no creyentes.
Una vez más queda comprobado que la religión es algo psicológico; dios existe... pero en la mente de las personas.
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