¿Y todo para qué? ¿Para qué sirvió el súper liderato, el mejor del torneo y el único del torneo, si en la Final el equipo se desvaneció ante el más grande rival, Tigres, quien además los marcó para siempre?
Después de todo, la Final regia de la Liga MX fue más pareja de lo que esperábamos; fue tan pareja, que Tigres, ante la incredulidad de muchos, fue quien se llevó el título (¿o tendríamos que decir "se robó" el título?).
El torneo Apertura 2017 del futbol mexicano tenía nombre: Rayados de Monterrey. Nadie más era digno y merecido candidato para el título que Rayados, quien con un futbol arrasador, jugaría la Final casi como un mero trámite. Pero Tigres reescribió la historia; cambió el final donde Rayados se coronaba en todo lo alto, y fueron los felinos quienes levantaron la Copa en un partido realmente disputado y altamente emocionante. Por increíble que parezca, cualquiera pudo haber ganado; Monterrey no fue ese equipo letal y asesino, y Tigres no fue el mismo de la Liguilla.
Un tempranero parecía anunciar el destino final de ambas escuadras. Pero el gol de vestidor de Dorlan Pabón no mató a un Tigres que aprovechó el exceso de cautela de Rayados, que nunca se animó a enfrentar a Tigres como lo había hecho con sus demás equipos durante todo el torneo.
Tigres reaccionó. Empató el partido y minutos más tarde se fue al frente en el marcador 1-2. Rayados ya no pudo regresar; se enfrascó en una lucha entre atacar, defender pero sin llegar a nada. Mientras tanto, Tigres se mantuvo estoico, quien pudo haber perdido la ventaja --Avilés Hurtado falló un penal al '85--, y al final Monterrey sacó a flote su trauma de la Final del Clausura 2016 contra Pachuca.
Se esperaba otro Monterrey y otros Tigres. Se esperaba otra final, el que la lógica indicaba. La Final se emparejó tanto, que al final lo que vimos fue casi un volado. Tigres sacó las garras para no terminar como la víctima que era. Demostró de lo que es capaz y a lo que puede llegar a jugar. Rayados se indigestó, se atascó, se topó con sus némesis y le tocó perder.
¿Es Tigres un digno Campeón? Por supuesto que lo es; le ganó al mejor, y lo hizo bien, de manera contundente. Y si Rayados hubiese resultado ganador, también hubiera sido un enorme Campeón.
Al final de todo, se cumplió una máxima del futbol mexicano: cualquiera puede ser Campeón.
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