Obsesivos compulsivos y derrotistas

Canal 11 tiene casi siempre una muy buena programación, y cuando se trata de transmitir programas extranjeros, generalmente no falla.

Y en esta ocasión hay que comentar sobre la serie documental que el Canal 11 transmite, se trata de Obsesivos, un extraordinario programa que aborda el tema del Transtorno de Ansiedad, una enfermedad psicológica que ataca a millones de persona en el mundo.

Pues esta serie lo que hace es mostrarnos, al estilo reality show, la vida de algunas personas que sufren éste padecimiento; nos invitan a conocer la vida de esas personas, así como las características de dicha enfermedad. Además, el programa le da seguimiento a la ayuda que los especialistas le dan a los enfermos.

Es uno de tantos programas que podemos ver en National Geographic, Discovery o cualquiera de este tipo, pero no deja de ser una serie bastante bien realizada y que a su vez es fácil de digerir, pero que a la vez no hace usar nuestra cabecita; no es un show donde se exhibe a las personas por sus enfermedades o problemas personales, o donde son tratadas como cosas raras y casi, casi como fenómenos de circo. Aquí todo es profesional, médico y científico, lo cual es lo más sobresaliente.

Pero hay mucho más que resaltar de la serie. Uno de ellos es que no es un programa para ayudar a la gente, sino más bien para conocer más de cerca la enfermedad del TOC (Transtorno Obsesivo Compulsivo), sus consecuencias, las técnicas para tratar dicho mal, y cómo el invididuo se enfrenta a la sociedad cargando este mal, entre otras cosas más; algo que también llama la atención es que no hay un "final feliz", ya que en cada episodio (donde se conocen a diferentes personas con distintos tipos de transtornos), podemos ver a un paciente que, después de meses de tratamientos y terapias, logra alcanzar ciertas mejorías, pero ahí nos dejan, y no sabemos si lo logró o no.

¿Pero por qué funciona tanto este programa y otros de este tipo? Porque nos encanta ver a otra gente sufrir, nos encanta ver a la gente caer y levantarse, ya sea física, mental, moral o psicológicamente; es porque somos derrotistas y nos fascina el dolor de otros, los problemas ajenos, y más si se trata de casos como estos, donde, las enfermedades vienen acompañados de síntomas extravagantes (por decirlo de alguna manera).

Como ejemplo, podemos poner el caso de la joven que le tiene pavor a los elevadores, su trantorno es tal, que no puede ni siquiera ver uno, porque luego entra en pánico y sufre un ataque de nervios. O el tipo que no puede salir más allá de su casa por temor a lo desconocido.

Gracias a que amamos ver este tipo de cosas, es porque funcionan estos programas, pero no es la razón principal. En realidad funcionan porque están bien hechos, son series de calidad, y no son denigraciones sociales.