Érase una vez un cantante italiano llamado Tiziano Ferro, que vino a México (como muchos de sus paísanos) a vendernos su música pop; pasado algún tiempo, se ganó el corazón de las chicas mexicanas y por supuesto sus gritos de locura que sólo Los Temerarios habían sido capacez de causar.
Tizianito se hizo conocido y admirado por las mujeres de Tenochtitlan, lo doraban y lo deseaban sexualmente; como todo italiano, era sexy, guapo, molto bello y con un carisma envidiable; una sonrisa que hacía que las mujeres se mojaran, y un feeling cautivador.
Tiempo después, Ferro, desde su natal Italia, en un programa de televisión, es entrevistado, y ahí, desde su radiante boquita, surge un argumento tan bello, tan elocuente y tan, pero tan cierto... que fue su tumba musical en México: "... Es imposible encontrar un mujer bella en México, todas son realmente feas, horrorosas y aterradoramente amargadas, gordas, desabridas, y además... ¡tienen bigote!".
Éste comentario llegaría rápidamente a México, y se expandría como fuego en bodega que se hace pasar por guardería. Las reacciones... fueron sublimes, maravillosas y llenas de odio, racismo, descriminación; homofobia, xenofobia e ignorancia. Además del femenismo ridículo, las reacciones hacía el comentario realista de Tiziano fueron de "Vamos a lincharlo", "hay que cortarle los huevos", "que pida disculpas de rodillas y haciéndole sexo oral a un charro".
Lo recuerdo perfectamente, era de tarde y enciendo el televisor, ¿qué veo? Veo a Paty Chapoy (La bruja de México) diciendo y convocando a todas las mujeres del país para que vayan al aeropuerto a recibir a Tiziano con pancartas de odio y desprecio, sí, cual rebelde libio llamando a los sublevados a levantarse en armas. Pero eso no fue todo, la traumada de Mónica Garza se atreve a decir que a lo mejor le gustan los hombres, pero no fue el único; el respetable Jacobo Zabludovsky, mete la pata y dice que a Tiziano seguramente le gusta "estar más con hombres que con mujeres", y remata diciendo: "es joto".
Pero todos los comentarios ardidos se centran en la frase de "tienen bigote", de ahí se agarraron todos --y creo que fue el factor principal para las represalias-- para reprocharle, de manera absurda, al cantante.
Primero, si es gay o no, eso no importaba y no importa, además están diciendo (con los comentarios "seguro es joto, por eso lo dijo") que ser homosexual es peor que el comentario que dijo desde Italia, así de estúpidos fueron los comentarios. Claro, ya se imaginarán cómo todas las mujeres idiotas de este país se pusieron, pegaron el grito en el cielo, tanto así, que ya ni en un orgasmo habían gritado tanto.
Y como era de esperarse, el tarado de Tiziano Ferro pide disculpas --con una cara de alcohólico-- y nadie las acepta, peor aún, los malos comentarios hacia su persona aumentan. Pero lo que más vergüenza da --vergüenza y pena ajena por las mujeres mexicanas-- es que todas las mujeres comenzaron a ponerse un bigote falso en la jeta como símbolo de reproche, se veían realmente ridículas haciéndolo, las muy mensas.
No, no defiendo a Tizianito. El punto aquí es el siguiente: Todo este revuelo y escándalo que se armó, ¿fue por "el mensaje o por el mensajero"?. Yo siempre me he preguntado, ¿y si el que hubiera dicho eso hubiese sido Laura Pausini? Es decir, una mujer, ¡AHH VERDAD!.
Así las cosas cambian, en México existe tanto machismo que las mujeres ya están hasta traumadas (lo cual es lamentable, porque es algo que sufren a diario las pobres mujeres), pero cuando se trata de defenderse de dicho machismo, ya no lo hacen con la cabeza sino con la boca. Si la del comentario hubiese sido Laura Pausini las cosas hubieran quedado en "assh, pues tú también, perra", y nada más, y todos no hubiéramos reído, los hombres hubiéramos creado chistes y se acabó; hubiera sido un momento cómico.
¿Pero por qué decimos que el comentario fue realista? Les daré una respuesta al estilo de Jorge Kaguachi: Porque sí.
Tiziano Ferro no dijo ninguna mentira, simplemente se dejó llevar por un esteoreotipo mexicano: La india María. Sí, esa imagen de la mujer mexicana con cara de gato (como el personaje de "Alicia en el país de las maravillas"), cabello ceboso, cola de caballo; cuerpo de tamal mal amarrado, y por supuesto los bigotes, esa es la idea, la imagen que Tiziano tiene de las mexicanas, así como algunas personas en otros países nos ven sentados debajo de un cáctus, con un sombrero enorme, Tiziano tiene su propia manera de ver a los mexicanos.
¿Las mujeres mexicanas no tienen bigote? ¡Claro que sí! Sólo tienen que ir al sur del país, y se encontrarán con mujeres bigotudas y feas, en México hay mujeres feas.
Ahora resulta que la belleza mexicana es parecida a la de las holandesas o las checas, la belleza típica mexicana es tipo Liliana Arriaga ("La Chupitos"), para qué se engañan, para qué nos engañamos.
No todas las mujeres mexicanas son bellas, también hay feas. Es un secreto a voces, todos lo saben, el problema es decirlo, y Tiziano lo dijo; hay muchos artistas extranjeros que piensan cosas peores de los mexicanos, pero no dicen nada. Tiziano dijo lo que pensaba... y dijo la verdad.
NOTA: El argumento de Tiziano Ferro fue modificado y se le agregaron algunas frases y palabras para que se apegaran más a la realidad.
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