¿Cómo funciona el fraude del Teletón?

Como ya es una costumbre, y como nadie dice nada, Televisa vuelve a hacer de las suyas, y ha vuelto a recaudar más dinero para dizque una buena causa, pero que en realidad es otro éxito más para su empresa y sus bolsillos, así como para sus amigotes que nuevamente han evitado que Hacienda les cobre impuestos.

Obviamente nos referimos al Teletón, que como cada año volvió a superar la cantidad recaudada del año pasado --que esta vez fue de 472 millones 556mil 170 pesos--. Con todo y las mismas actuaciones de sus artistas --que ya no sabemos si todo lo que dicen sentir es de verdad--, el mismo programa que no ha cambiado desde el primero, que sigue siendo igual de acartonado y atrapado en los 90, así Televisa y su negocio más grande que tiene, el Teletón, han vuelto a verles la cara a los mexicanos que, con su bondad e ignorancia, siguen cayendo en la misma mentira, y, al parecer, lo seguirán haciendo, pues creen que el Teletón es 100% honesto, aún apesar de que les ponemos las pruebas en la cara.

Justo en estas épocas, donde la familia y los amigos están reunidos para compartir y dizque arreglar sus problemas, es cuando sale Televisa para aprovecharse del aguinaldo de fin de año y de los mexicanos que se creen todo lo que ocurre en la televisión, y más si se trata de un niño calvo y sin brazos que sufre de cáncer; luego, aparece el Teletón y su enorme mercadotecnica para complementar esto que es uno de los fraudes más grandes del país.

Dos días de programa de Teletón (sin chiste alguno), sirven para conmover a la población y para que ésta se anime a donar grandes o pequeñas cantidades a dicha causa, pero no son lo únicos, ya que los que también le entran al negocio de la mafia del Teletón, son las distintas empresas comerciales que ahí aparecen y que muestran sus marcas, y que por supuesto también donan enormes cantidades de dinero. Independientemente de que lo hagan por sus inmensas intenciones altruistas (lo cual dudo mucho), éstas marcas, a diferencia del televidente que aporta, saben de qué trata el negocio y por dónde va la cosa, pues le entran al Teletón, no sólo por la causa, sino porque saben que es el mejor lugar para evadir impuestos, impuestos que al final terminamos pagando nosotros los simples ciudadanos.

Por eso, para entender mejor cómo funciona la mentira del Teletón, aquí está una explicación detallada de la mecánica que Televisa utiliza para no pagar sus impuestos, para que la gente los pague por ellos y además quedarse con dinero ajeno:

Según el Artículo 31 de la Ley de Impuestos Sobre la Renta, las empresas pueden deducir de sus impuestos todo el dinero que den para la construcción de obras que debería hacer el gobierno, como hospitales y centros de rehabilitación. Es decir, si las empresas hacen algo bueno por la sociedad, Hacienda se los recompensa disminuyéndole los impuestos.

Así, el dinero que la gente (de buena fe) le dona a Televisa para una causa supuestamente "noble y altruista", Televisa lo descuenta de SUS impuestos.

El Teletón es un negocio porque NO deduce de sus impuestos lo que dona al Teletón, pero Televisa SÍ descuenta de SUS impuestos las donaciones ajenas. La cosa funciona así:

Decenas de miles de ciudadanos donan pequeñas (o grandes) cantidades al Teletón, creyendo que hacen un acto de caridad. Con el dinero que aportan los ciudadanos, Televisa le hace a Fundación Teletón UNA SOLA APORTACIÓN a nombre de Televisa. Luego, Fundación Teletón le da a Televisa un recibo deducible de impuestos que Televisa le entrega a Hacienda... Y hacienda le descuenta esa cantidad a los impuestos de la empresa, lo que implica una ganancia neta para la empresa.

El Teletón prácticamente nunca le da a los ciudadanos recibos para reducir sus donaciones. Obtener esos recibos es largo y engorroso, y a casi nadie se le ocurre pedirlos, y además como que da pena lucrar con lo que uno dio para una "caridad"... ¡Pero a Televisa no le da pena!

Y si creían que eso era todo... ¡Aún hay más!

Si Televisa le debe $100 millones a Hacienda, entonces el Teletón se plantea recaudar más, supongamos $150 millones. Al final de la recaudación, el dinero que dona la gente siempre rebasa la meta; supongamos que llega a los $190 millones, Televisa deduce de sus impuestos $190 millones, pero como sólo le debía a Hacienda $100 millones, entonces Hacienda le tiene que regresar ¡$90 millones en efectivo! (y la onomatopeya de caja registradora suena por doquier)

Por supuesto, Televisa no le regresa ni un peso a la gente que donó para el Teletón.

El Teletón es un enorme negocio, un gran fraude, donde la experiencia para manipular la mente ignorante de los mexicanos, además de sus sentimientos, es la manera más eficaz para seguirse enriqueciendo y evitar pagar impuestos, que al final del día, esos impuestos que TELEVISA NO PAGA, el bondadoso ciudadano termina pagándolos.

Y así funciona la mentira del Teletón. Como decíamos en un artículo anterior, existen más instituciones honestas en el país, el Teletón no es el único, ¿por qué seguir enriqueciendo y pagando los impuestos de Televisa a costas de una buena causa? Cuando podríamos donar nuestro valioso dinero a otras organizaciones que sí necesitan nuestra ayuda y que no les roban a nadie, y que su única finalidad es ayudar a los demás.

Si ya de por sí vivimos en un país corrupto, que se maneja con intereses personales, donde se realizan negocios dudosos, etc., ¿Cómo es posible que todavía creamos en el Teletón? ¿Que no se suponía que estábamos en contra de la desigualdad? ¿Que no se suponía que estábamos en contra de las empresas que se enriquecen a costas del pueblo que sigue igual de pobre? Pero nadie hace nada, al parecer, nos gusta que nos vean la cara y que nos sigan robando.

Claro, a menos que sean de esas personas que tienen la idea retorcida de que mientras todo sea por una buena causa, las formas en que el Teletón se lleva acabo no importa, ¿Y luego por qué nos andamos quejando de la situación del país?