Sería muy fácil comenzar a dramatizar por el mediocre resultado de la Selección Mexicana en el partido recaudatorio (también conocido como "amistoso") ante Perú, un partido tenebrosamente aburrido y sin ningún tipo de relevancia. O bueno, en realidad sí tiene relevancia, porque económicamente fue muy relevante.
Una Selección Mexicana que no mostró un estilo definido y una idea futbolística, pues los jugadores ni siquieran se conocen; era un equipo inédito que nunca habían trabajado juntos, y además, tampoco conocían al rival, aunado a esto, enfrente había una Selección con un nivel más bajo y plagado de jóvenes, prácticamente era un Selección menor peruana, aún así, el equipo mexicano no pudo sacar el resultado, logrando el quinto empate en lo que va del año.
Hablar de éste partido es hablar de los negocios de Televisa y la FMF, pues el juego --fuera de Fecha FIFA-- fue sólo otro de las tantos partidos para sacar dinero, verle la cara a los aficionados (televidentes) y a los paisanos que van al estadio a ver al producto comercial de las televisoras. En lo deportivo, el juego no deja nada, pero en lo económico, sí que fue un partidazo.
Lo que sí es preocupante es que el equipo mexicano, apesar de que no estaban todos los titulares, todavía no logra solventar los problemas ofensivos, así como los defensivos, de hecho, la poca contundencia parece estar más marcado; los cinco empates del Tricolor se deben a las imprecisiones a la hora de definir las jugadas, y esto sigue siendo el Talón de Aquiles en esta Selección.
Por supuesto que es momento de hablar de una crisis, una Selección mexicana que no es capaz de ganarle a los "rivales" que ha enfrentando, algún problema ha de tener; estamos hablando de que México juega en la ¡Concacaf!, no en la UEFA, en la ¡Concacaf!, donde el nivel es asquerosamente mediocre, ruín. No es posible que México no haya ganado ni un sólo partido, en la ¡Concacaf!, ante equipos que además no se encuentran en óptimas condiciones (como Honduras, Estados Unidos, ¡¡Jamaica!!). Si esto no es crisis, entonces qué es.
El partido ante Perú, evidenció la falta de definición, de contudencia, con jugadas claras de gol, el equipo mexicano ha perdido la capacidad para meterlas. Sí, era un amistoso sin jugadores claves y con muchos debutantes, pero se supone que también era un juego para "observar" a nuevos jugadores (¿o será una excusa que las televisoras le dieron a "Chepo" de la Torre?).
Claro, no podía faltar el carácter psicótico del entrenador, que nuevamente salió molestó a la conferencia de prensa, como si la prensa fuera la culpable del pobre rendimiento de su equipo. Les digo, la otra vez pidió disculpas (por orden de alguien, seguramente), y ahora, como que no queriendo la cosa, sale a arremeter contra los medios; "Chepo" parece tener una fobia hacia los medios de comunicación, y es raro, pues ahí lo vemos en varios comerciales con gran desemvolvimiento.
El partido fue gris y tedioso, al igual que la propia Selección Mexicana y el futbol que ha venido desplegando. Lo único rescatable del encuentro fueron el portero --como ya viene siendo costumbre-- y Raúl Jiménez, quien fue que le echó más ganitas al partido. Ángel Reyna falló un penal, efectivamente, ni con un penal regalado el equipo mexicano puede ganar.
Y los problemas cada vez se hacen más grandes, primero, tendrán otro "partido amistoso" ante Nigeria, un rival un poco más competitivo, y después el "reto" se llamará Panamá, ya en las Eliminatorias, y ahí, ya con los titulares --y cuando digo titulares me refiero a Javier Hernández--, el equipo tiene que comenzar a funcionar, a como dé lugar, a fuerzas, se tiene que sacar el resultado más positivo. Otro empate sería el colmo.
Existe una crisis, podría ser apenas el inicio, pero lo peor de todo, es que no sabe cómo el equipo mexicano pueda salir de ella, ¿Un triunfo podría levantar al equipo, ahuyentar los fantasmas y evitar la inminente crisis?
Foto | Mexsport
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