Parece que el chiste de la actual sociedad es ser viral, vivir un momento viral o ser parte de algo viral.
Y de esta manera, volvemos a lo mismo de siempre: valernos de las modas superficiales, irnos por la cómoda y crear productos "alternativos" basados en las actuales modas de la volátil sociedad. ¿De qué estamos hablando? De la televisión y de su afán de querer producir programas, shows, documentales a costas de las "redes sociales", una minia de oro que en realidad es un arma de doble filo.
Y como ya cualquiera está cayendo en esta maña de hacer programas basados en las modas de las redes sociales, era de esperarse que el canal National Geographic también lo hiciera, y es por eso que hace poco sacó al aire un programa (para nada original) llamado "Vacaciones accidentadas", una serie que aborda el tema de accidentes sufridos por personas mientras éstas se encontraban... de vacaciones.
Haciendo un paréntesis, a este famoso canal de ciencia y geografía, le encanta el derrotismo, le encanta transmitir el sufrimiento de la sociedad por sus pantallas, ya que su programación sigue una misma línea sensacionalista (socialmente hablando).
Y sí, nuevamente se recurre a internet para hacer un "programa de contenido", se deja de lado la creatividad, la originalidad y hacemos como que reinventamos las cosas. Así es como los canales de televisión intentan sobrevivir a la valancha de las modas sociales.
Al igual que "¿Qué pasó después?", de Discovery Channel --otro programa sacado de las redes sociales--, el de Nat Geo se basa en casos reales de personas que grabaron sus accidentes durante las vacaciones, nada más que aquí no hay ciencia, no hay una explicación sobre el accidente ni nada por el estilo, es más bien el morbo de ver a gente casi matándose pero salvándose en el último momento. Hagan de cuenta que es "Extranormal" pero más sofisticado.
Por ejemplo, en un episodio podemos ver a unos amigos haciendo tonterías en un río, uno de ellos sufre un accidente, casi se mata, y sobrevive, pero los videos son estos que encontramos en internet, en YouTube, es decir, es lo mismo de siempre, hacer un programa serio con videos que en internet son chistosos.
No hay nada nuevo, nada novedoso; es el típico video más visto de internet, nada más que contada por narradores sobreactuados y en un canal importante, en donde se le da otra dimensión al video y a lo ocurrido en el mismo video.
Otra cosa, aveces los videos ni siquiera son grabados durante las vacaciones, pues hemos visto algunos accidentes como cualquier otro, no precisamente en vacaciones. Además, Nat Geo cuenta con un montón de programas similares, ¿para qué seguir con lo mismo? Quizás porque ellos también querían encajar en la sociedad con esto de los videos virales.
El programa es otra versión de los cientos que vemos en el canal de la ventanita amarilla, es corriente, es aburrido, repetitivo y para nada original, muy predecible.
Nos están dando más de lo mismo: programas sacados de internet, modificados por un canal de cable (el cual pagamos por ver) y puestos en la pantalla como "el gran programa, la gran producción".
A ver hasta dónde llegamos con esta moda de llevar a internet a la televisión.
Foto | Archivo
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