Mientras todo el país se rasgaba las vestiduras viendo los partidos de México en las Eliminatorias de la Concacaf, así como el Mundial Sub-17, otra Selección, sin nadie viéndola, conseguía dos triunfos heroicos y avanzaba a un Mundial.
Y nadie habla de ellas y parece que nadie quiere hacerlo (y nadie lo hará), apesar de haber conseguido dos triunfos impensables. Se trata de la Selección Femenil Sub-17, quien se coronó Campeón del Premundial Femenil Sub-17 de la Concacaf que se realizó en Jamaica --torneo femenil que nadie vio--. Sí, fueron Campeonas y nadie dijo nada.
El Premundial Femenil Sub-17 de la Concacaf es el torneo que se realiza en la zona y que otorga dos boletos al Mundial Femenil Sub-17 (que en esta ocasión se realizará en Costa Rica, en marzo del 2014). Y las mexicanas se llevaron dicho torneo, al vencer y eliminar en la Semifinal a Estados Unidos, y en la Final a Canadá, a ambos en tanda de penales. Y además, el Tri femenil consigue el primer lugar de manera ¡invicta! Y nadie dijo nada.
Si usted amigo hombre es un misógino y usted amiga una sumisa que sólo les importa el género masculino y lo que éste realice, déjeme le cuento lo que el Tri femenil logró en este torneo, donde consiguió su pase al Mundial de la categoría.
En Fase de Grupos empató con Haití y Guatemala (1-1), mientras que en su tercer partido derrotó por marcador de 7-0 a El Salvador --cabe destacar que las salvadoreñas no sabían qué deporte estaban jugando--. Luego, en la Semifinales, se encontraron con USA, y parecía que todo estaba acabado, pero empataron a un gol, para luego derrotarlas 4-2 en penales, eliminándolas del torneo ¡y del Mundial!
Por si fuera poco, las golosas del Tricolor no se conformaron y fueron por más, mucho más; en la Final, en un juego realmente aburrido, empataron a cero goles, y nuevamente en panales vencieron a la poderosa Canadá también por marcador de 4-2. México y Canadá ya habían calificado al Mundial, pero había que definir al primero y segundo lugar, y las mexicanas se llevaron el primer puesto.
México cobró primero y Rebeca Bernal adelató al Tricolor. Emily Alvarado, guardameta tricolor, se vistió de supergirl al atajar el primer penalti de las canadienses. Eva González y Miriam García continuaron con la buena racha al hacer efectivos el segundo y tercer penal, respectivamente.
Canadá se había acercado al anotar su segundo penaltie, pero el tercero no tuvo la misma suerte. Aylín Villalobos tuvo la oportunidad de sellar la victoria pero la muy zonza erró su tiro, y la tanda se mantenía 3-1. Fue hasta el quinto cobro que México se coronó Campeón del Premundial Femenil Sub-17 de la Concacaf. Y nadie dijo nada.
Pero rapidito con esos festejos, que la cocina no se limpia sola. |
Efectivamente, mientras la fracasada Sub-17 varonil era recibida con bombos y platillos, entre flashazos y ovaciones, durante su llegada al país --y creo que hasta un documental sobre esta llegada van a hacer--, a la femenil, ¿quién la fue a recibir? Nadie. Ellas sí hicieron algo grande, pero nadie, nadie se dio cuenta.
Sin reflectores, sin atención mediática, lo que la femenil hizo en Jamaica es algo grande. Eso de vencer a dos gigantes del área y del mundo, y además coronarse Campeonas del torneo, siendo que sólo EUA y Canadá suelen hacerlo, ya es digno de portada o primera plana deportiva. Pero no, en lugar de darle el reconocimiento que las chicas del Tricolor se merecen, los medios del país, y por consecuencia, la gente, el aficionado, se volcaba más hacia lo que pasaba con la Sub-17 varonil o los vividores de la Selección mayor.
"Nueva Zelanda ya piensa en México"; "Reid, capitán neozelandés, no estará ante México", "La Sub-17 regresa con la cabeza en alto", decían los títulos de los diarios deportivos del país. ¿Y la Sub-17 femenil?
El América y su curioso cierre de torneo eran temas de conversación. Tigres y Morelia y sus panzazos daban de qué hablar. Pero de la Selección Femenil nadie hablaba, ni aunque se hayan traído el primer lugar.
Esto, evidentemente, es machismo y misoginia, además de discriminación. Y todo comienza con los medios de comunicación, que hacen uso del "machismo deportivo", donde las mujeres sólo sirven como adorno o como simple entretenimiento (generalmente visual), y ya cuando se trata de hablar de mujeres deportistas pues no siempre se toma en serio. Aunque no sucede con todos los deportes, el futbol femenil es el más desplazado.
Pues con el futbol femenil ocurre algo muy peculiar, ya que apesar de que el futbol es el deporte número uno en el país, nadie habla sobre el femenil, ¿por qué? Porque es futbol femenil, más claramente, porque son mujeres.
Claro que esto no es exclusivo de México, en la mayoría de los países también se le presta poca atención al futbol femenino, pero en México la atención es casi nula. Esto sin contar el apoyo (económico y deportivo) de la FMF, aunado al de los medios de comunicación, que hacen de la Selección Femenil un fantasma sin voz ni voto; sin atención y sin reconocimiento.
Hay que tomar como ejemplo lo que sucede en Estados Unidos, Alemania y Francia (principalmente), donde el futbol femenil recibe una gran atención, y por consecuencia recibe más apoyo.
Si el futbol americano --deporte gringo-- acapara gran parte de los medios mexicanos (televisión, radio, diarios, internet,...), ¿por qué no ocurre lo mismo con el futbol femenil? Digo, a mí me gustaría saber más sobre los próximos partido de la Selección femenil, de sus jugadoras, de sus condiciones de trabajo, cómo trabajan, cómo la FMF las ignora y las hace de menos, etc., que escuchar una y otra vez por qué los Vaqueros de Dallas no funcionan, o por qué su Quarterback continúa en el equipo.
A mí me gustaría saber más sobre la Selección femenil y su camino al Mundial de Canadá 2014 que del misógino y machista Rafael Nadal.
De las Selecciones varoniles, desde la Sub-17 hasta la mayor, se hacen reportajes y hasta programas especiales. El Premundial Sub-17 recibe gran atención, por ejemplo, en ESPN, FoxSports, Televisa, TV Azteca y cualquier canal deportivo y no deportivo, se la pasan hablando todo un programa sobre un partido de México ¡¡y hasta cuando es del Premundial!! Como si fuera la Final del Mundial mayor.
Una cosa es que no tengas tiempo de hablar de futbol femenil, o que no sea un negocio rentable --porque también en los medios deportivos se manejan intereses--, que no venda o que a nadie le interesa, y otra muy distinta es no hablar porque se tratan de mujeres, de futbol femenil, y dar por sentado que a nadie le interesa.
Me llama la atención los medios de comunicación dándole más cámara a la llegada de la Selección varonil Sub-17 al país, como si fuera el suceso, así como la conferencia de prensa de Raúl Gutiérrez. Pero más me llama la atención la forma en que se manejan las noticias del Tri femenil en los distintos medios, pues son pequeñísimas notas breves en donde comentan sobre lo que la femenil hizo, y nada más.
Y ni pensar sobre un seguimiento amplio y continúo de los partidos y torneos de las mexicanas. Ni por error se habla de ellas.
No se habla, no se discute. El Tri femenil no da de qué hablar. Los programas no generan una discusión o toman algún tema relacionado y lo analizan. No, eso no ocurre, y no sabemos cuándo vaya a cambiar todo esto. Y no es raro, pues esto no es más que la sociedad mexicana y sus arraigados ideales sobre el género femenino.
El futbol femenil se merece mucho más que 15 segundos en los medios de comunicación, y más si se trata de la televisión, el medio masivo con más influencia (en muchos aspectos) entre los mexicanos.
La indiferencia hacia el futbol femenil no es porque se trate de futbol femenil, sino porque se trata de mujeres.
Foto | FMF
No hay comentarios.:
Publicar un comentario
Cada mensaje que nos llega de ustedes, cada mensaje que se publica en Ximinia, lo leemos y (en el 99% de los casos) lo respondemos. Por favor, sigan escribiendo, solo pedimos buen criterio. Aquí hay lugar para casi todo: réplicas y contrarréplicas, críticas y datos duros, sugerencias de lecturas, humor, muestras de inconformidad y de indignación y, por supuesto, bromas. Solo pedimos civilidad y respeto. Más información.