Orquesta Esperanza Azteca: o ¿cómo matar una parvada de pájaros de un sólo tiro?

La Orquesta Esperanza Azteca es más un producto comercial que una orquesta musical. La marca TV Azteca está demasiada marcada, y cuando la OEA aparece en escena, ya no sabemos si estamos viendo una orquesta o un comercial de TV Azteca y su fundación.

La Orquesta Esperanza Azteca está cumpliendo 5 años... Hace cinco años, TV Azteca descubrió una mina de oro la cual no se cansa de explotar.

Se trata de un proyecto creado por TV Azteca y Fundación Azteca (como si existiera alguna diferencia...) donde niños(as) y adolescentes de todas las edades participan en una orquesta sinfónica donde desarrollan sus habilidades musicales, además de que son beneficiados en otros aspectos.

La idea de todo esto es ayudar a niños y niñas de escasos recursos a que exploten su talento y, principalmente, a que puedan seguir estudiando y evitar así, aunque sea un poco, el resago educativo en México.

Cuando esta idea surgió, no me pareció una mala idea, al contrario. De hecho, hasta la fecha me sigue pareciendo una excelente idea, digno de imitarse en otros rubros, no sólo en cuestiones artísticas (en este caso la música). El grandísimo problema es que TV Azteca ha convertido este proyecto en un producto comercial, o en otras palabras, no ha sabido manejar la imagen y el concepto de este proyecto, pues ha usado la imagen y situación económica y social de niños y niñas para vender su empresa y su increíble altruismo. Es decir, TV Azteca ha lucrado con la inocencia y los sueños de estos niños, aprovechando el hecho de que es complicado culpar a alguien de lucro cuando está haciendo algo tan evidentemente beneficioso, como lo es la Orquesta Esperanza Azteca, y TV Azteca lo sabe, sabe lo que hace y sabe cómo funciona el asunto.

Cada vez que escucho hablar de la OEA, el 70% se trata de TV Azteca y su fundación. Si ésto no es sacar provecho para promocionarte y vender tus logros, tus proyectos y decirle a todos que existes y mantener el negocio a flote, entonces ¿qué es? Con el sólo nombre de la orquesta ya nos damos cuenta por dónde va la cosa.

Anteriormente ya habíamos hablado de manera más extensa sobre este tema (no olvide leer los comentarios de empleados de TV Azteca e integrantes de dicho proyecto donde se la pasan tergiversando el artículo enlazado), pero vale la pena volver a recordar cómo TV Azteca mata dos, o tres o hasta más pájaros de un tiro.

Básicamente, la Orquesta Esperanza Azteca es más un producto comercial que una orquesta musical. No estoy diciendo que esa sea la idea del proyecto (al menos no en principio), sino que eso es lo que parece y en lo que está convertido, eso es lo que se ve cada vez que estos niños salen al escenario. La marca TV Azteca está demasiada marcada, y cuando la OEA aparece en escena, ya no sabemos si estamos viendo una orquesta o un comercial de TV Azteca y su fundación.

El manejo que le dan es más de un concepto comercial que un proyecto para ayudar a salir adelante a niños. Por supuesto que la idea es promocionar el proyecto, pero hay formas de hacerlo sin caer en anuncios publicitarios tan descarados. Azteca ha exagerado la manera de promocionarse con dicho proyecto. Ya sabemos que TV Azteca es el creador de la OEA, no tienen por qué estar todo el tiempo diciendo de quién es el proyecto. Con el sólo hecho de vestirlos con los colores de la empresa ya nos están diciendo cuáles son las otras intenciones de TV Azteca. Al final, los pobres niños músicos terminan siendo anunciantes de la empresa. Sí, la publicidad de TV Azteca es algo inherente al proyecto --porque fue creado por ellos, y de alguna forma tenían que decirlo--, pero TV Azteca exagera pero en serio; se aprovecha de esto para sacarle todo el jugo posible a esta pequeña gran mina de oro llamada Orquesta Esperanza Azteca.

Cada presentación de la OEA viene con todo el paquete, que incluye: publicidad permanente (vestimentas con los colores de la empresa), fundación y televisora (Fundación Azteca y TV Azteca [que es lo mismo]), palabras de los niños y niñas (agradecimiento a TV Azteca y glorificación de la misma) y discursos doblemoralistas de los dirigentes de la televisora y la fundación (más publicidad hacia TV Azteca).

Las fundaciones de las televisoras de este país se caracterizan por ser bastante moralinas, y Fundación Azteca no es la excepción; la Orquesta Esperanza Azteca es muestra de ello, de cómo lograron crear un formidable proyecto pero que, por incapacidad, inexperiencia o por simple avaricia, lo han convertido en una marca, en un logotipo, en un producto más de la televisora.

Lástima. Este proyecto no debería manejarse así. Debería ser una orquesta de verdad, no una ventana más para que TV Azteca se anuncie.

Sé que la idea no es netamente comercial, pero es lo que parece.

Foto | TV Azteca