Quién más sino España. La Furia Roja vuelve a levantar el Trofeo de Campeón de Europa, ese Trofeo que en realidad nunca perdieron, ya que siempre les perteneció, siempre la tuvieron en sus manos, y nuevamente, las sacan de sus vitrinas, para mostrársela al mundo y decir una vez más que son Campeones de la Eurocopa 2012.
La víctima --porque ni siquiera fue rival-- fue Italia, que simplemente se dedicó a ver cómo los españoles les pasaban por encima, por un lado, por el centro y adentro. Magistral y casi perfecto, así jugó España esta Final que la hizo suya de principio a fin, en la cual terminó matando y goleando sin piedad alguna.
Ceremonia protocolaria
Como ya es una costumbre, en las ceremonias previas siempre hay algo qué comentar, en esta ocasión fue la parte de los himnos, donde, como siempre, la UEFA presenta algo diferente en las Finales, todo para presumir su primermundismo, que en esta Euro dejó de un lado, ya que implementó el polémico «resultado directo», el cual acuchilló a varios equipos.
En la parte donde se interpretan los Himnos Nacionales, que aveces son emotivos y otra veces sin chiste, hubo coristas que se colocaron cerca de la media cancha, detrás de los futbolistas, que con sus talentosas voces acompañaban el Himno Nacional de cada Selección, que el sonido local reproducía. Primero se interpretó el fantástico Himno de Italia (Himno de Mamel), donde los coristas se lucieron, además, Gianluigui Buffon cantó su Himno con mucha emoción y orgullo. Luego, fue turno para el Himno de España (La Marcha Real), la cual también tenía sus respectivos coristas, pero... resulta que el Himno de España no tiene letra, es nada más la música que los españoles tararéan, lo cual llamó la atención ya que dichos coristas nomás se quedaron parados detrás de los españoles, ya que no había nada qué interpretar o cantar. Tal vez pudieron haber cantando el famoso "La, la, la...", para acompañar el Himno, pero no, mejor se quedaron parados con sus bufandas mostrando una sonrisa enorme.
Una Final entre dos grandes(¿)
Luego del patrioterismo europeo, llegó lo esperado; comenzó el partido. Un juego, que en teoría, porque ya ven que en esta Euro todo estuvo basado en teorías, sería un duelo cerradísimo y competitivo, muy competitivo. Después de unos minutos, todas esas expectativas se vinieron abajo de manera impresionante.
No, no fue un juego cerrado, no fue un juego peleado; fue un partido donde España hizo lo que quiso, sin piedad y donde recuperó su futbol, su grandeza y su título de "mejor equipo del mundo".
Los primeros minutos fueron de ida y vuelta, donde Italia arrancó con esa nueva propuesta ofensiva. La primera de peligro llegó por parte de España, en una jugada de tiki-taka que culmina Xavi Hernández, pero que pasa apenas por arriba de la portería de Buffon; era el primer aviso de España, o mejor dicho, una probadita de lo que se vendría después.
Tres minutos más tarde, al 13', el barcelonismo se haría presente, cuando Iniesta filtra una pelota larga para Zest Fàbregas, quien se mete hasta la cocina para centrar una pelota que remata (casi de chiripa) David Silva, para marcar el primero de muchos goles rojos. Después del primer valde de agua fría, Italia no bajó los brazos, ya que siguió ofendiendo; se fue al frente y trató de cerrarle los espacios a España, casi le da resultado, ya que llegan al área española, pero con disparos sin mucho peligro. Al minuto 20', Giorgio Chiellini tiene que salir por Balzaretti, una cambio forzado debido a una lesión, algo que sin duda influyó en la escuadra azzurri.
Al 26', Italia, aún con vida, juega con convicción e intenta buscar el empate, con un centro que remata Balotelli, pero que Iker Casillas le desvía; al 28', Antonio Cassano se quita a la defensa española y saca un disparo muy débil, pero que mostraba la buena ofensiva italiana. Pero al minuto 41', ya cuando España comenzaba a adueñarse de todo el partido, llega Jordi Alba en una descolgada y pone las cosas 2-1, y a partir de ahí, en el partido sólo existió un equipo, sólo existieron 11 jugadores, no más.
Ese gol le dio a España el poder total para dominar el partido y hacer de él lo que quisiera. Y lo que hicieron fue darnos una cátedra de futbol total, donde demostraron porque son considerados los mejores del mundo; un juego donde España regresó a ese futbol espectacular y letal, demoledor. Un futbol que en toda la Euro no habían mostrado en su totalidad, y ahora, en la Final, la sacó y se la restregó en la cara de los italianos.
Para la segunda mitad, ya con una Italia incierta, el juego comenzó a tomar su rumbo final. Antonio Di Natale entra por Cassano e itenta darle algo de esperanzas a los itálicos, pero nada les alcanza; al 46', un remate de Di Natale que pasa por arriba sin mucho peligro, España responde con un jugadón de Fàbregas, cuando se mete hasta el área chica donde hace gran cantidad de fintas, y saca dispara que detiene un nervioso y confuso Buffon. Al 51', nuevamente Toto Di Natale le queda una pelota ante Casillas, pero que éste alcanza a detener y quedarse con ella. Al 60', Thiago Motta, que había entrado en el segundo tiempo, se lesiona, se desgarra y tiene que salir del juego, a Italia ya no le quedaban más cambios, así que desde el minuto 60' tienen que jugar con 10 hombres; lo cual fue el acabóse de los italianos.
España comenzó a pasearse por el campo, con 123 toques para llegar al área, la Furia Roja estaba en un verdadero entrenamiento, pero con sus hijos de 5 años. Al 83', ya con una Italia perdida, sin sentimientos, sin alma, sin esperanza y sin futbol, llega Fernando "El Niño" Torres para marcar el tercero, en una jugada que simplemente tiene que cruzar ante Buffon; el zombie Torres vuelve a anotar en una Final de Eurocopa, ya que en la Euro del 2008, marcó el gol del triunfo ante la Selección de Alemania, donde también llegaban como ligeros favoritos para llevarse dicho torneo. Al 88', España estaba jugando contra ellos mismos; era una cascarita lo que traían, ya que Juan Mata (que había ingresado de cambio) sentencia el partido con el cuarto gol. Y el dominio rojo era tan aplastante, que por poco Sergio Ramos hace un gol de taconcito, para que vean cómo estaban las cosas. Ahora, si Ramos anota ese gol, los jugadores italianos hubieran buscado otra profesión, porque un gol de Ramos de esa forma ya hubiera sido demasiado.
Así, La Selección Española se convierte prácticamente en un equipo de época, en un equipo que pasará a la historia del futbol. Independientemente de que todo haya estado arreglado desde un principio por la UEFA y España, lo que han mostrado en la cancha no tiene nombre. Es simplemente el futbol en su máxima expresión.
Con esto, España logra su tercer título (Sudáfrica 2010, Euro 2008 y 2012) y su primer Bicampeonato.
Premiación y festejos
El partido ya había terminado desde el minuto 70', pero las reglas se tienen que respetar, así que el árbitro Proença pita el final del partido para darle paso a una tranquila celebración española. Decimos tranquila porque no hubo una reacción eufórica al momento del pitazo final, ¿será la costumbre de ganar siempre?
También hay que resaltar el trabajo de los árbitros, quienes pasaron desapercibidos (como debe de ser), ya que su trabajo fue impecable; el árbitro Pedrito Proença ni apareció. Un arbitraje ejemplar, tanto que hasta pasaron a saludar a los dirigentes y además les dieron medallas, para que sintieran un poco lo que se siente ser un futbolista campeón.
Otra vez Iker Casillas levantando otra Copa, de seguro que ya ni se acuerda cuántas Copas ha ganado. Luego de recibir la Copa --que si el trofeo de la Champions League le apodan "La Orejona", la de la Euro vendría siendo "La Chata"-- y festejar en el podio el momento cumbre que todo futbolista sueña, bajaron al campo para hacer todo lo que un festejo implica: vuelta olímpica, saludos y agradecimientos a la afición (que era mayoría, y es que el contrato con la UEFA también dice que tiene que haber más españoles de España en las tribunas), entre otros festejos más.
Cabe destacar las lágrimas de varios futbolistas italianos, entre ellos, los que lloraban como niños chiquitos, estaba Bonucci, quien no soportó la derrota y lloró ríos de lágrimas; aunque no sabemos si por la derrota en sí o por la forma en que perdieron. También la zebra Chiellini soltó algunas lágrimas; Riccardo "El Mapache" Montolivo, al subir por su medalla de plata, se soltó en llanto, quien con una sonrisa fingida intentaba calmarse. Antes, la Selección de España y Cataluña, le hizo el pasillo a los italianos, algo que siempre es digno y ejemplar.
Curiosidades
-Las lágrimas inconsolables de Bonucci. No paró de llorar durante toda la premiación.
-La Copa de Piqué. Luego de recibir la Copa y alzarla, bajan al campo y Gerard Piqué se va por otro lado, acariciando la Copa como si fuera su novia, con eso de que ya no se anda tirando a Shakira.
-La familia. Durante los festejos, antes de la premiación, bajaron al campo los hijos de algunos futbolistas, donde se pusieron a correr por toda la cancha. Por un momento fue algo curioso, pero después ya fue demasiada miel; Torres jugando con sus 15 hijos, tampoco era para tanto.
-Triplete. España consigue el triplete tras ganar la Euro del 2008, el Mundial del 2010 y nuevamete la Euro del 2012.
-Una vez más la doble moral de los catalanes y su pseudoindependencia. Xavi, Piqué, Váldes, Cesc, Alba, Iniesta y Busquets (también pondríamos a Puyol) siguen jugando y ganando con España, país del cual pretenden, desde hace mucho, independizarse, ¿quién los entiende?; Cataluña no es España, pero mientras logramos que eso sea una realidad como tal, seguiremos siendo pieza clave en el accionar de la Furia Roja, ¡Olé!
-Casillas, el segundo mejor portero del mundo. Iker Casillas ha probado una vez más por qué es considerado el segundo mejor arquero del mundo; se ha cansado de ganar campeonatos a diario, y no hay quién lo pare. Y decimos que es el segundo mejor portero del mundo, porque el mejor guardameta del mundo se llama Bengi Price, y nadie más podrá superarlo.
Fotos | Getty Images
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