América, de panzazo, en Semifinales

Ya nadie entiende al América, ya nadie entiende al futbol mexicano. Tuvimos que esperar cinco partidos para ver un juego que pareciera de Liguilla, o por lo menos fue un partido que tuvo tintes de Liguilla.

Partido de vuelta de los Cuartos de Final de la Liguilla Apertura 2012, con Decio de María vuelto loco por la pasión y el espectáculo que hasta ahora hemos visto en su Liga MX (mentira), América recibía al Morelia en el Azteca, un estadio que se fue llenando poco a poco (¡Trágate eso, Vergara!). Pero, como ya es una costumbre, la afición tendría que vivir el pase de su equipo con todo y sufrimiento incluido, con drama y con los nervios de punta, algo que nadie sabe por qué se dio así.

Y si nuestro amigo Decio se dio cuenta, ésta es una de las cosas que el futbol mexicano siempre nos regala: no sabemos qué equipo anda bien, porque un día vemos a un gran América que domina a su rival jugando como visitante, y al otro día, vemos al Morelia, que antes era dominado, jugarle y verle la cara al América en su propio campo, y casi eliminarlo en los últimos minutos.

Nada está escrito en el futbol mexicano; no importa si en el partido de ida te dan un baile, en el de vuelta todo puede cambiar y hasta puedes jugar mucho mejor que tu contrincante que es el gran favorito.

Y esto ocurrió en el Azteca, donde América, con una gran ventaja de 3-0 en el global, casi hace el ridículo de la Liguilla (aunque sí hizo el oso), al acceder a las Semifinales de puro panzazo y rezándole a Monesvol para que el partido ya se terminara, pues Morelia (que se llevó el triunfo por 1-2) sólo tenía que anotar 1 gol más para dejar fuera a Las Águilas, afortunadamente para los locales, Monarcas no tuvo más tiempo en el reloj, porque los purépechas ya estaban encima del Ame al final del encuentro.

Incluso hasta llegué a pensar por un momento que en lugar de un partido de futbol, estaba viendo La Casita del Horror de Los Simpson, porque nomás veía puros amarillos matándose entre ellos mismos y sucumbiendo en la cancha.

Un pésimo partido del América, que apenas al minuto 1', con un error terrible de Mosquera, Joao Rojas enciende las alarmas, un gol que no decía mucho, pues no fue algo elaborado, y que durante el transcurso del partido, las cosas fueron regresando a la normalidad cuando el Ame toma las riendas del partido, aunque, algo que no podía faltar, la poca contundencia y poca profundidad hicieron que el América sufriera demás. Morelia no era la gran cosa, generaba pocas llegas pero con gran peligro, en cambio, los americanistas nunca concretaron una jugada clara (a excepción del gol, que fue circunstancial), para luego dejar que Morelia hiciera lo que quisiera.

Al minuto 39', Raúl Jiménez pondría orden en el encuentro, ya que marca el del empate momentáneo. Pero minutos después, al 41', Miguel Sabah demuestra que ya no le tiene miedo al triunfo, y es cuando marca el tétrico 1-2, y nada más le faltaba 1 gol para eliminar al mismísimo América. Un gran centro ante una mala marca de los centrales americanistas que dejan que Sabah se meta y desvíe la pelota para congelar los ánimos del americanismo que ya se veía jugando las Semis.

América estaba dando un partido para el olvido; Morelia pudo haber anotado hasta 4 goles sin problema alguno, pero la puntería la tenían bastante chueca.

Ya para la segunda mitad, los visitantes no bajaron la guardia y seguían tirados al frente buscando el gol del pase, porque ya se habían dado cuenta que no era imposible de conseguir. Un partido que se jugó más en media cancha, pues el América fue incapaz de generar peligro en el área rival. Y al 83', Carlos Ochoa, que había entrado de cambio segundos antes, tiene en sus pies el pase a las Semifinales, cuando en un rechaze de Moisés "Robocop" Muñoz, le deja el balón para que simplemente la empuje, pero en lugar de pegarle a cualquier parte, estrella la pelota en el pecho de Muñoz, salvádonse así el América de una absurda eliminación ante unos aguerridos Monarcas, que supieron aprovechar la confianza que el Ame les brindó. Morelia merecía pasar, porque fue quién salió a buscar el partido (claro, estaba necesitado, era obvio) y fue quien mejor hizo las cosas, algo que debió de haber hecho el América, pues un equipo grande, en cualquier momento es grande, no importa si ya todo está resuelto, pero éste América no lo entiende así.

Si el América piensa en ser Campeón, tendrá que hacer varios ajustes, porque ni defensivamente ni ofensivamente se vio a un equipo sólido, y si vemos el futbol con que el León destazó a Cruz Azul en 90 minutos, los americanistas tendrán que mejorar un montón de cosas antes de jugar las Semifinales y pensar en jugar una Final, que hoy más que nunca, es una Final muy hipotética.

Foto | Mexsport