La máxima catástrofe del futbol mexicano sería no calificar al Mundial (del 2014 y el que sea). La depresión deportiva se sentiría en todos lados, pero donde en verdad calaría hondo, sería en los bolsillos de quienes dirigen el futbol mexicano: las televisoras y los socios comerciales. Pero apesar de todo esto, si la eliminación se diera... nada cambiaría.
Y nada cambiaría porque el futbol mexicano es un negocio, lo único que se haría es no volver a cometer el mismo error, pero utilizando la misma metodología (mañas) de siempre; las dueños, los dirigentes y los socios serían los mismos, habrían "modificaciones", pero simplemente se estaría echando la basura debajo del tapete, como es costumbre. El futbol mexicano siempre será un negocio, no importa si la eliminación un día toque la puerta del Tricolor, hasta que el futbol mexicano no sea manejado como deporte, las cosas no cambiarán, ni con una eliminación, no cambiarán.
De que fue una estupidez, fue una estupidez. Todavía no logro entender los motivos, pero en una de esas y la FMF ya arregló todo para que no haya problemas en calificar al Mundial, porque en la Concacaf todo es posible, y los arreglos están a la orden del día, este sería el único motivo de la ratificación del "Chepo". ¿O acaso será masoquismo? Y es que el haber dejado a de la Torre en el banquillo de la Selección, fue un error, pero lo más triste de todo es que ni el peligro que representa el tan mentado "Chepo" por una posible eliminación, serviría como escarmiento para los que dirigen el futbol mexicano.
Todavía estamos tratando de entender las razones (deportivas [si es que existen]) por la cual José Manuel de la Torre continúa al mando de la Selección Mexicana. Esto no sólo nos muestra el descaro de los dueños y directivos sobre el manejdo del balompié mexicano, sino que además nos dejan muy en claro que esto es sólo un negocio, y que lo seguirá siendo, no importa si el ridículo de una eliminación se da. Y la ratificación del "Chepo" es una muestra clara de que los negocios y los intereses van primero.
Como cualquier aficionado objetivo que quiere lo mejor para su equipo y para su liga, me gustaría que la Seletsión perdiera ante Honduras en el Azteca, de visitante ante el pequeño gigante USA y caer otra vez en casa, o perder todos, para así quedar eliminados del Mundial. Esto, en teoría, avisparía a los dueños, directivos y demás gente sin qué hacer, y las cosas cambiarían (quizás radicalmente) en muchos sectores, pero sólo en teoría, ya que en realidad la eliminación (un golpe durísimo) no cambiaría nada.
Si México queda eliminado, lo ideal sería que Emilio Azcárraga deje de lado el negocio, que deje el futbol mexicano --porque está claro que lo único que hace es perjudicar--, se lo dé a los que saben (aunque no sé quienes serían) y que el futbol mexicano se meneje solito, y que se maneje como deporte y no como negocio. Esto significaría que Televisa y TV Azteca tendrían que actuar como lo que son, simples televisoras que transmiten los partidos del Tricolor, y nada más, que no se metan y que no decidan en el futbol mexicano. Poner a personas talentosas y capaces para que lo dirigan, y enfocarse en lo deportivo, claro, sin dejar de lado lo comercial, que también es importante, pero que no debe estar por encima de lo deportivo.
La liga, tendría que profesionalizarse mucho más, y en varios pero varios aspectos, dejar el maquillaje y el circo y convertirse en una liga sería. Hacer que los técnicos salgan, aprendan, se instruyan más; regular la compra/venta de jugadores (nacionales y extranjeros), no tratar a éstos como mercancía, eliminar la malaria del "pacto de caballeros" y otras prácticas de mafiosos... Darle prioridad a los torneos internaciones... En fin, un montón de cosas, casi, casi crear una nueva liga de futbol.
Pero para que esto ocurra necesitaríamos un milagro --y los milagros no existen--, pues el problema es que las televisoras son dueños del futbol mexicano, y lo manejan según sus intereses (y como es un negocio que deja millones, es imposible que lo suelten, y ni con el tsunami de una eliminación lo harían); ahí está el "Chepo", quien recibió el voto de confianza por parte del adorado Emilio, el mismo Emilio que sólo piensa en sus intereses y no en lo deportivo y en el bienestar del futbol nacional. Además, ni sabemos (y ni lo sabremos) quién decidió que el "Chepo" continuara, ¿la FMF o los socios comerciales? Asimismo, Televisa es quien le da cuerda a Decio y Compeán, quienes son unos verdaderos incompetentes que no saben nada. Así como el resto de los dirigentes, que de veras no tienen idea, no tienen la capacidad, el talento y la creatividad para manejar una liga deportiva.
Y para ratificar lo anterior, nada más hay que ver el actual retroceso del futbol mexicano; del "Si México ganara el Mundial", hemos pasado a "Si México queda eliminado del Mundial". ¿Cuándo caímos tan bajo? Los aires de crecimiento parecen irse junto con la calificación.
Entonces, si México queda eliminado del Mundial, lo único catastrófico serían las pérdidas económicas, el golpe anímico de los aficionados sería lo de menos, el negocio se vendría abajo (aunque se recuperaría), pero no habría un cambio de fondo, que es lo que se necesita para que el futbol mexicano crezca, fluya, mejore, explote y sea realmente competitivo.
Si la Selección quedara eliminada, se buscarían culpables, todos se pasarían la papa caliente, otros se lavarían las manos, algunos "saldrían" (porque probablemente serían despedidos o porque descubrirían algo llamado vergüenza), y quizás se trataría de "limpiar" las formas en que el futbol es manejado, pero sería otra cortina de humo --algo que en el futbol mexicano es muy común--, para después, ya cuando la tormenta pasó, reiniciar el negocio, igual que siempre, como si nada hubiera pasado.
De esta manera, el círculo vicioso no se rompería, continuaría, un poco tocado, pero el futbol mexicano seguiría dando vueltas alrededor de él; y conociendo la ignorancia de los dirigentes, no me extrañaría que esto haría "más fuerte" la forma en que se realizan las cosas, sería como una especie de "aprendizaje", ya que según los dueños del futbol mexicano, verían el lado positivo de este (no tan) hipotético desastre, porque ellos piensan que todo lo están haciendo bien, que no haya resultados es otra cosa. Porque además, hay que recordar que el futbol es el reflejo de la sociedad, y basta ver el futbol mexicano para vernos en él; así como se maneja el futbol mexicano, así se maneja el país.
Y no pasó nada, la eliminación fue un golpe duro, pero nos levantamos. Otro ciclo comienza, y lo mismo de siempre: a vender humo, a vender falsas ilusiones; a seguir haciendo dinero; las televisoras a lo suyo, lo que mejor saben hacer, inflar al equipo (y jugadores), aprovecharse de la ignorancia del aficionado y continuar vendiendo fraudes... Y cada cuatro años, a sufrir, gozar, ganar y volver a sufrir; ir a un Mundial, quedar en el mismo lugar de siempre (hacer el mismo papel de siempre), regresar, terminar con un proceso (volver a buscar culpables) y volver a comenzar. Como cada cuatro años.
El futbol mexicano tiene potencial --es más que evidente--, pero mientras este potencial siga siendo explotando erróneamente por personas que sólo velan por sus intereses, seguirá estancado en la misma mediocridad, viviendo de rachas y de las bondades de la Concacaf, engañándonos una y otra vez, mientras que otros (USA), lentos pero seguros, siguen escalando peldaños.
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