No quisieron ganar

La poca o nula ambición, además de la falta de claridad y contundencia a la hora de ir al frente, hicieron caer al equipo mexicano ante un equipo brasileño que jugó con 10 hombres durante 45 minutos; el conformismo --que ya es algo histórico en el futbol mexicano-- del equipo tricolor evitaron un claro triunfo ante Brasil.

Primero hay que hablar sobre el "homenaje a San Oswaldo", que yo me di cuenta que era homenaje hasta que le entregaron los reconocimientos y demás, por que, a media semana, De la Torre había dicho que el llamado de Sánchez era por darle un homenaje, pero no sabía que se estaba retirando (o lo estaban retirando) de la Selección, eso se llama no estar bien informado.

Luego, vino la ceremonia de los himnos, que duraron 30 minutos por parte de Brasil y 15 por parte de México. Minutos después, el homenaje a Oswaldo Sánchez, que con una inmensa sonrisa lo decía todo: "Si no me quería ir, todavía daba pa' más", decía Oswaldito.

Y por fin comenzó el partido. Con gran ambiente y algarabía por parte del público; la afición anda que echaba tiros.

Minutos de comenzado el juego, vino el autogol a favor de México en un centro de Pablo "U Can't C Me" Barrera que desvía David "Bob Patiño" Luis. Después de este autogol, el equipo mexicano dejó de atacar, de ir al frente y buscar más; pero además, el equipo brasileño se adueñó más de la pelota, y desde aquel gol, El Tri no volvió a tener una jugada clara y de peligro.

Ya en los últimos minutos del primer tiempo llegó la expulsión de Dani Alves, por haberse llevado al Chicharito en el área chica, en el cual el árbitro marca pena máxima. El penal lo cobró Andy Guardado... y lo falló, ante una gran atajada del portero brasileiro; aunque si Vuoso hubiese estado la pone en el ángulo, inalcanzable para el arquero.

Y cuando creíamos, cuando pensábamos y cuando suponíamos un marcador más amplio a favor del Tri... resulta que en cinco minutos el equipo visitante le da la vuelta al marcador CON 10 JUGADORES; Ronaldinho hace el primero, la pelota la pone en el poste del portero --Sánchez, el homenajeado, se traga ese gol como en lo viejos tiempo, y es que sí, quería recordar esos momentos inolvidables en su último partido como seleccionado--, pero ese gol vino desde una falta sin sentido del Cheroke Pérez, para después dar paso a Marcelo (el machete de CR7) que se mete hasta el área chica, no caminando, pero trotando y mete un gol sobre la cabezota del homenajeado.

Así pues el equipo brasileño rescata un partido que se suponía ya tenía perdido. Y por si eso fuera poco, México tuvo para empatar (2-2) el partido, pero se didicaron a imitar a pateadores de la NFL anotando goles de campo.

Y así termina una vez más una película que ya hemos visto un montón de veces; México se va al frente y dejamos de atacar, nos dan más ventaja y seguimos sin buscar más, después, en 2 segundos nos terminan dando la vuelta, nos ensartan por los dos lados y terminan eyaculando sobre nosontros. Y lo peor de todo es que algunos retradados lo llaman "lección", que dizque es una lección que tenemos que aprender, si esta "lección" nos la han estado dando a cada rato y nunca la aprendemos.

¿Cuándo aprenderemos a matar a un equipo desde el primer momento y no esperar a que nos maten?.

El invicto del "Chepo" se fue gracias a sus alineaciones y sus jugadores que no quisieron ganar.

Y para terminar, aquí un pequeño homenaje a Oswaldo Sánchez.

-Placa de reconocimiento $800 pesos.
-Playera conmemorativa $1,200 pesos.
-Equipo brasileño $2 millones de pesos.

Que en tu homenaje te hayas comido el primer gol y en el segundo no hayas podido hacer nada ... no tiene precio.

Hay cosas en la vida que no se pueden comprar, como un homenaje en con la Selección.