"La libertad de expresión tiene límites"

Bergoglio no sólo intenta defender su gremio, sino que además está justificando el atentado terrorista y además defendiendo el extremismo islámico.

El Papa Francisco I, apegándose a los dogmas de la Iglesia Católica, salió a defender lo indefendible, a justificar lo injustificable: la religión islámica, o lo que es lo mismo, el atentado terrorista contra la revista Charlie Hebdo. Entre las idioteces que salieron de su retorcida mente, resalta lo siguiente: "La libertad de expresión tiene límites". Si lo dice alguien que representa a una institución que ha puesto límites en muchos aspectos sociales desde el primer momento de su fundación, pues sí.

Por supuesto que la libertad de expresión tiene límites, siempre y cuando se trate de un abuso de ésta libertad, que como cualquier derecho, se presta para ser utilizada en contra de una sociedad con fines personales o a favor de una persona, movimiento, país o religión.

Claro, Francisco no se refería al abuso o al mal uso de la libertad de expresión, sino al hecho de utilizar la libertad de expresión en contra de una religión, es decir, el Papa dice que utilicemos la libertad de expresión pero no para exhibir las atrocidades de las religiones, que a todas luces le causan un daño terrible a la humanidad, como el islamismo, el caso más extremo. Aunque el jocoso Papa lo dice de manera casi subliminal, y argumenta además que no hay que "burlarse de la fe de las personas". ¿Fe? ¿La misma fe que mató a más de 12 personas en Francia? ¿La misma fe que no soporta ser exhibida y ser mostrar como lo que es: simples supersticiones?

Y además remata diciendo que es "inadmisible burlarse de la fe (sic)". Si con "burlarse" se refiere a denunciar las atrocidades y daños que pueden y han llegado a causar las religiones, me parece que Bergoglio, otra vez, nos quiere ver la cara de pendejos. ¿Y sí es admisible matar a alguien que se ha burlado de tu fe? ¿Acaso el Papa quiso decir que es peor burlarse de la fe que un simple asesinato? Me parece que no hay comparación.

Además, la Iglesia Católica tendría que aclararnos a qué se refiere con eso de "es inaceptable burlarse de la fe", pues para esta empresa de vándalos cualquier crítica hacia su nombre es considerada una burla.

Además, si nos apegamos a su argumento, la Iglesia es la primera en rebasar los límites de la libertad de expresión. Por ejemplo, al promover el racismo, al homofobia, el sexismo y todo tipo de discriminación a cualquier hora y en cualquier momento. Esto es un abuso de la libertad de expresión, aunque también incluye el abuso de poder.

Con esto, el Papa intenta defender a las religiones, en especial el catolicismo, y es que él y su red criminal denominada Iglesia Católica, saben que el islam es una religión que practica sus dogmas de forma más literal y extrema, pero en escencia promueven los mismos valores, la misma moral y las mismas ideas retorcidas que el cristianismo. El islamismo es igual de perjudicial que el cristianismo/catolicismo, la única diferencia es que el islam va más allá, mientras que el cristianismo lo de hace de manera más cautelosa.

Y según el Papa, ¿hasta dónde llega el límite de la libertad de expresión? Puedes hablar de lo que quieras cuanto quieras, criticar y reclamar, pero cuando se trata de temas que incluyen a la religión, entonces, ¡cuidado!, has llegado al límite de libertad de expresión. Evidentemente Bergoglio no sabe que gracias a que en el pasado se cruzó los límites de la libertad de expresión, este mundo es un poco mejor que cuando la Iglesia Católica mandaba a medio planeta en una época a la cual se le conoce como Oscurantismo. Jorge Mario no sabe que gracias al hecho de haber roto los límites de la libertad de expresión, nos nos quedamos en la Edad Media más tiempo, y gracias a que rebasamos los límites de la libertad de expresión, hoy puedo escribir esto sin que me torturen y me quemen vivo en la hoguera (al menos en mi país, pues en otros países, como en Arabia Saudita, un bloggero puede ser encarcelado y torturado por decir lo que yo estoy diciendo ahora).

Ni el islam, ni el Papa y ninguna otra mente primitiva le van a poner límites a la libertad de expresión.

Gracias a que muchas personas en el pasado hicieron caso omiso al límite de la libertad de expresión, hoy sabemos que la Iglesia Católica no es más que una cloaca habitada por parásitos que viven de la credulidad y supersticiones de millones de personas. Gracias a que se cruzó el límite permitido de la libertad de expresión, hoy podemos denunciar las atrocidades que comete la Iglesia Católica en cualquier lugar donde se pare, por ejemplo, al ignorar los límites de la libertad de expresión, podemos denunciar y condenar el racismo, la misoginia y la homofobia que forman parte de los valores del catolicismo, y que inculca a sus seguidores, haciendo de las sociedades un mundo hostil para los que no entren o no compartan el mundo imaginario católico; podemos denunciar la forma en que es rebajada y denigrada una persona por el simple hecho de ser homosexual o por el simple hecho de ser mujer, o la manera en que manipulan las mentes de los africanos para que mueran como moscas debido al SIDA, todo porque el preservativo es un pecado que insulta el plan de Dios.

Si respetáramos los límites de la libertad de expresión, no estuviéramos hablando de cómo la Iglesia Católica promueve el pensamiento mágico, lo que detiene el progreso de la humanidad, sobre todo en los países subdesarrollados, todo con la excusa de salvarnos del pecado para lograr llegar al añorado paraíso, un mundo mágico creado por mentes trastornadas, pero mientras éste paraíso llega, la Iglesia se hace de millones y millones y disfruta de todos los lujos y comodidades que esta Tierra llena de pecado les brinda.

¿Que la libertad de expresión tiene límites? Si yo hago uso de mi libertad de expresión para criticar las masacres, los asesinatos, la violación de los derechos humanos, entre otras cosas más, que cometen los seguidores de la religión islámica, así como el abuso de poder y del abuso sexual por parte de los clérigos, ¿estoy rebasando los límites de la libertad de expresión? En realidad, lo que Francisco quiso decir fue: "Hablen de otros, pero no de nosotros los religiosos porque nos exhiben como somos en realidad: criminales".

Bergoglio sabe que el ataque a Charlie Hebdo deja muy mal parado a las religiones, pues se trata de un ataque que muestra lo que unos ideales basados en mitologías más antiguas son capaces de provocar, y sobre todo, dejan en claro que las religiones no sirven para nada, mas que para dividir, fomentar odio, muerte y para secuestrar física e intelectualmente la libertad de las personas. Es por eso que el Papa tuvo que salir a cuidar su castillo de arena llamado catolicismo para que no se le colapsara aun más, pues la gente, abrumada y confundida, podría comenzar a usar el intelecto y llegar a la conclusión de que las religiones no son simples creencias personales inofensivas, sino todo lo contrario, son un lastre para la humanidad que afectan directa e indirectamente a todos en este mundo, y lo seguirán siendo hasta que comencemos a madurar intelectualmente, sólo así podremos tirar las religiones a la basura.

Bergoglio no sólo intenta defender su gremio, sino que además está justificando el atentado terrorista y además defendiendo el extremismo islámico. "Esto pasa cuando la gente se burla de sus creencias, si no quieres que te vuelva a suceder, entonces respeta los límites de la libertad de expresión, pues ellos (islam) tienen derecho a practicar su fe", es lo que el Santísimo Padre quiso decir.

La libertad de expresión no tiene límites y no debe tenerla. Precisamente por pensamientos, por ideas como ésta es que se dan atentados terroristas, por personas acostumbradas a imponer sus ideas basándose en el miedo y la intolerancia, todo por religiones y sociedades donde la libertad de expresión está limitada según las creencias y costumbres religiosas.

"La libertad de expresión tiene límites", esta frase lo pudo haber dicho un islamista mientras le disparaba a personas que usaron la libertad de expresión para denunciar el salvajismo islámico.

Mientras que en Francia los 12 asesinados fueron considerados héroes, para la Iglesia Católica no son más que simples personas que cruzaron los límites de la libertad de expresión, al burlarse de la fe de los devotos.

Fotos | AP