Acarició la Final

Estarán de acuerdo conmigo que México pudo haber ganado el partido por el mismo marcador con el que cayó, 2-0.

Brasil elimina a México en Semifinales del Mundial Sub-20 de Colombia 2011, y lo hace con individualidades, algo de lo que el equipo tricolor carecía.

Sí, México escondía tras el juego de conjunto la falta de individualismo, ni "El Cubo" Torres, ni Pulido, ni Dávila pudieron marcar diferencia en el cuadro mexicano; no hubo un jugador diferente que marcara la páuta en el equipo. Argentina tenía a Lamela, Brasil tiene a varios y de Portugal ni hablamos, entonces, para contrarrestrar éste problema México supo crear un buen juego colectivo, lo que lo llevó hasta instancias nunca antes vistas en esta categoría.

Había mucha confianza en el equipo mexicano para enfrentar a Brasil, y es que después de superar las espectativas, ahora todo era posible.

En el partido no había favoritos, pero los brasileños comenzaron a decir lo contrario cuando comenzaron el partido con varias llegadas a la zona tricolor, todas sin peligro, pero Brasil avisaba con más posesión de balón durante el inicio del juego. México intentó equilibrar las cosas pero nomás no encontró la puntería, así de fácil, El Tricolor pudo haber tomado ventaja desde el primer tiempo, pero las buenas intervenciones del portero Gabriel (que en un choque con Erick Torres le dejaron el ojo como a Margarito vs. Paquiao) y la falta de contundencia y sangre fría de los jugadores mexicanos hicieron que la Final sólo quedara en una ilusión.

Y si a eso le sumamos que algunos futbolistas como el famoso "Cubo" Torres comenzaron a perder la cabeza desde un principio... Erick Torres fue amonestado, primero, por soltar un codazo, luego en una acción mano a mano con el portero, le deja la pierna derecha en la cara, aunque algunos comentaristas trataron de justificarlo diciendo que intentó saltar, fue evidente que Torres le deja un "no me olvides" al guardameta, cuando saltas no le dejas los párpados colgando como adornos, ¿o sí?. Luego, suelta otro intento de cachetada, que el árbitro no lo ve por que si no se nos va, y por si eso fuera poco, para ponerle la cerecita en el pastel, falla un gol a menos de 4 metros de la portería, solo frente al portero, ya cuando el encuentro se encontraba 2-0.

Así pues, México no puede acceder a la Final, en un partido donde Brasil no fue la gran cosa, simplemente tuvo dos... y las metió; México tuvo más... y faltó contundencia. Quizás a México le faltó ser más decidido a la hora de atacar, arriesgar más ante un equipo amázonico que tampoco exigió mucho al ataque y que derrepente atrás dejaba algunos huecos.

México acarició y tentó la Final.

Es una lástima, ya nos veíamos alzando una segunda Copa, pero hay que tener cuidado, aún no sabemos si esto ya es una realidad del futbol mexicano o simplemente una buena racha, una muy buena racha. Como he dicho antes, no es por ser derrotistas pero hay que saber distinguir entre lo real y un sueño.