Es más que una revancha, es la antesala para la consolidación de Diego Simeone y un estilo futbolístico llevado a otro nivel. Es más que una revancha, es la necesidad y obligación de un equipo de conseguir otro título para seguir alimentando su legendaria historia.
En la primera Final, en 2014, ambos equipos diambularon entre la luz y la sombra: el Atlético de Madrid pasó de la gloria al infierno y el Real Madrid logró escapar del abismo para probar las mieles del triunfo. Una auténtica final cardiaca. Una Final que estaba para cualquiera, y por si fuera poco, la segunda Final, ahora en 2016, la puede ganar cualquiera.
Real Madrid y Atlético de Madrid volverán a verse las camisetas en la Final de la UEFA Champions League, la Final de Milán 2016. Una verdadera y esperada revancha para el Atleti, quien en aquella Final tuvo la Orejona en sus manos, pero le fue arrebatada por un Real Madrid que no se dio por vencido ni hasta el último segundo.
No parece haber muchas diferencias entre esta y la anterior Final, donde ambos equipos llegan con las mismas posibilidades, aunque con la balanza ligeramente inclinada hacia uno de ellos.
Al Atlético, en la Final del 2014, le faltó mantener hasta el final su estilo de juego, pero se desconcentró y perdió el rumbo. Esta vez, veo al Atlético más fuerte y más sólido que en aquella Final, y por supuesto, este Atlético domina mucho mejor su estilo.
El Real Madrid es un misterio. Entre enfrentamientos con equipos chicos y grandes, es difícil separar al Real Madrid verdadero del ilusorio; y es que los Merengues han llegado a la Final sin ganarle a nadie, es más, el Manchester City (Semifinales) se murió de nada en el Bernabéu, ante un Real Madrid que no estuvo a la altura de una Semifinal, y más cuando se jugaba su pase a la gran Final.
El Atlético eliminó en Semifinales a un Barcelona en plena caída libre, pero tiene su mérito. Los colchoneros impusieron su estilo de juego a una gran ofensiva, neutralizando así el ataque culé, y lo hicieron de manera impecable, dejando claro que han pulido mucho más su estilo.
A pesar de que Real Madrid sigue contando con grandes figuras, aún no ha logrado reflejar en el terreno de juego todo su potencial. En cambio, el Atlético, acostumbrado a pelear con el cuchillo en la boca, luce más competitivo con su llamativo juego defensivo y contragolpeador.
El estilo de juego del Atlético es formidable; se basa en un juego mega defensivo pero sin perder el estilo (y los estribos [a excepción de su D.T., que a veces los pierde por completo]), y luego contragolpear de manera vertiginosa, lo cual hace atractivo un estilo que no gusta por muchos. Claro, hay que saber hacerlo, y el Atlético tiene al técnico y a los jugadores necesarios para llevar a cabo una idea que hasta ahora los ha llevado a dos finales de Champions.
Por el desempeño de ambos durante todo el torneo, y por los cambios futbolísticos que ambos han sufrido, veo con más posibilidades al Atlético. Lo veo con más caché de Campeón que un Real Madrid que llega a la Final por nombre y camiseta.
Con estilos de juego completamente opuestos, la Final de Milán 2016 podría tener tintes similares a la de hace 2 años.
Foto | Ximinia
Reviewed by José L. Bravo
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7:16 p.m.
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