Un Super Bowl para la historia

Los Halcones de Atlanta ganaban el partido 28-3 en el 3er. Cuarto. En los últimos dos Cuartos los Patriotas hicieron la gesta heroica al lograr 25 puntos y empatar el marcador. El juego se fue a tiempos extras y Nueva Inglaterra pasó a la historia.

Quizás el mejor Super Bowl de todos los tiempos. La remontada más grande en un Super Bowl. El mejor QB de la historia, el entrenador más ganador y, probablemente, el equipo más grande de los últimos años. La mejor defensiva contra la mejor ofensiva. Todo en un sólo partido para hacer del 2 de febrero del 2017 un día histórico en el futbol americano de la NFL.

Aunque Nueva Inglaterra era favorito para este Super Bowl LI, los Halcones no llegaban como víctimas al encuentro. De hecho, después de lo mostrado en toda la temporada y el partidazo ante los Packers en el Campeonato divisional, parecían ser los únicos capaces de detener a Brady y compañía; y así lo estaban haciendo, estaban dominando y cerca estuvieron de levantar su primer SB de su historia, pero cuando no había que correr riesgos, los Halcones de Atlanta simplemente la cruzazulearon.

En el juego por el Campeonato divisional, Tom Brady fue un desastre, y en el Super Bowl la historia se estaba repitiendo; si Halcones hubiesen sido mucho más constantes y contundentes (como lo fueron a lo largo de la temporada), de otra cosa estuviéramos hablando; los Pats jamás se hubieran levantando de la paliza que los Falcons estaban gestando, pero dicha paliza jamás la supieron culminar --y si no lo hicieron fue por la defensiva de los Pats y la cuasi-anestesiada ofensiva de Falcons, de la cual se esperaba mucho más--. Los errores a la hora de sentenciar y manejar el partido, le costó el título a Atlanta.

Durante los primeros dos Cuartos los Falcons se estaban convirtiendo en un torbellino, pero les faltó mantener esa inercia, y más ante unos Patriotas que saben cómo venir de atrás.

El partido fue mejor que el Half-time show con Lady Gaga
Lo mejor, lo más espectacular y dramático vendría para los últimos dos cuartos, pero antes, Lady Gaga haría acto de presencia en el Espectáculo de Medio Tiempo, el cual, en mi muy humilde y mediocre opinión, me pareció una presentación insípida y una imitación de las anteriores presentaciones, sobre todo de los Black Eyes Peas.

A mí Lady Gaga siempre me ha parecido una cantante/showgirl sobrevalorada --y sobra decir que no canta--. En un principio llamó la atención por su propuesta, pero después, a mi entender, se ha vuelto una parodia de sí misma.

Después de haber visto a los Rollings Stones, Bruce Springsteen, Prince, Tom Petty y hasta Madonna en los más recientes Súper Tazones, ver a Lady Gaga no me pareció para nada atractivo. Pero al parecer, para muchos (como los de la NFL) Lady Gaga vendría siendo como una especie de Beatle y Elvis Presley. Hazme el gringo favor.

Luego de que Lady Gaga nos interrumpiera sólo para aburrirnos, daría inicio la segunda mitad, donde la historia comenzaría a escribirse; ¡y de qué manera!

Los Falcons iban ganando el partido 28-3. Los Patriots necesitaban un milagro... y lo consiguieron de la mano de Tom Brady, el que podría ser el QB más grande de todos los tiempos.

Primero, los errores de Falcons al intentar avanzar. Después, el momento más sublime del partido, la atrapada de Edelman, el cual prácticamente le abrió el camino a los Pats rumbo al título. Aunque polémica, la jugada sirvió para que Brady llegara al soñado 1ro. y gol, donde, ante la incredulidad y asombro de todos, empatarían el partido 28 a 28.

Nunca nadie había remontado un marcador de 28-3, pero los Pats lo hicieron, y en qué momento y de qué manera.

Entonces un Super Bowl se iría por primera vez a tiempos extras. New England sufrió para empatar, pero la suerte le estaba sonriendo, porque el volado le dio la oportunidad de avanzar primero, con lo que prácticamente selló su quinto título. El volado, a mi parecer, fue crucial: si a los Halcones les hubiera tocado ofender primero, muy probablemente hubieran conseguido ese touchdown de oro que los Pats lograron de manera dramática.

Fue así que, en el climax del futbol americano, los Patriotas de Nueva Inglaterra se coronaron Campeones del Super Bowl LI de la mano de Tom Brady y Bill Belichick, quienes además pasaron a la historia como los máximos ganadores de Super Bowls.

De 7 finales alcanzadas, Patriotas han ganado 5, todas ellas comandadas por el dúo Brady-Belichick. Y ni hablar de los récords de Brady, que se cansó de imponer récords tan sólo en éste SB51.

Sin duda, un equipo, un entrenador y un QB únicos en su clase, quienes demostraron porqué siempre los ganan todo.

Por si fuera poco, toda esta historia la vimos en un sólo partido. La historia se reunió en un mismo día para hacer del Super Bowl LI el mejor de todos los tiempos. Un Super Bowl para la historia.

Foto | Getty Images