La escasa creatividad llevó a TV Azteca a desmantelar un programa de revista y dejar sólo la sección de cocina. Fue así como surgió ¿Qué hay de comer?.
En TV Azteca, así como han desaparecido las telenovelas (y dicen que ya no van a hacer más, ¡bendito sea Dios!) han aparecido nuevos programas, entre ellos, uno dizque de cocina llamado ¿Qué hay de comer?. Es conducido por Omar Fierro, quien se encarga de preparar los platillos, y es acompañado por un grupo de analfabetas que apenas tienen talento para vivir.
El programa me parece detestable. Es intrascendente, irrelevante y terriblemente irritante. Vi un programa completo, y cada minuto que pasaba se volvía más insoportable; al final, terminé odiándolo por completo. No sólo por sus nefastos conductores, sino por lo que pretende ser.
Básicamente, el programa no es más que la famosa y trillada sección de cocina que vemos en cualquier programucho de revista, nada más que con una hora de duración. Imaginen cualquier programa de revista donde abunda el mal gusto, la vulgaridad y la falta de contenido, quiten todas las secciones y dejen sólo la de cocina, ¿qué queda? Así es, ¿Qué hay de comer?, el programa de El Trece.
La idea era hacer un programa de cocina y mezclarlo con un programa de revista... el resultado es un vómito.
Para las personas que están acostumbradas a ver programas de cocina pero de calidad, donde hay producción y un concepto verdadero --como los programas donde expertos se centran en lo que están preparando, o aquellos que rayan en producciones cinematográficas--, al ver ¿Qué hay de comer?, será como estar viendo a una bola de niños haciendo pasteles de lodo. Así de malo es éste intento de programa.
¿Cuál es lo novedoso del programa? Nada. Tomar una sección de un programa de revista (y adornarlo con secciones ¡que vemos en los programas de revista!), no es novedoso. Es poco imaginativo, poco creativo. Es querer engañar a la gente.
Omar Fierro, con su actitud jovial y relajada, no parece el anfitrión del programa, sino un invitado que fue a compartir sus conocimientos culinarios. Las conductoras que lo acompañan, eso parecen, acompañantes (sabe a lo que me refiero con "acompañantes", ¿verdad?); éstas chicas a duras penas pueden hilvanar dos oraciones coherentes. Y como carecen de la suficiente materia gris como para aportar comentarios creativos, no hacen más que hacerse las chistocitas y retorcerse durante todo el programa. Y si a esto le sumamos otros seudoconductores que llegan a compartir sus amplios conocimientos de cultura general (sarcasmo), el programa termina convertido en un sketch de programa de revista.
Lo reitero, es un programa detestable. Sus conductores son odiosos, tremendamente superficiales, sin talento y sin personalidad. Es una producción de tres pesos, casi improvisada, un programa que alguien se sacó de la manga porque no quiso hacer el esfuerzo de montar algo más elaborado. En fin, un programa amateur, ruin, vacío y seco de contenido.
Si a usted le gustan los programas donde sobresale el analfabetismo y el mal gusto, ¿Qué hay de comer? es para usted.
Foto | TV Azteca
Vaya que TV Azteca no se da por vencido, cuando vi 20 minutos de "cuentamelo ya" (si, !!20 minutos!!) crei que era el peor programa que habia en tv abierta y de pronto los aztecos decidieron hacer algo todavia mas asqueroso.... eso es tener ganas de superar a tu rival y no mamadas. :D
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