Ni tan favorito... Francia no sólo tenía la obligación de ganar, sino de despleglar en la cancha un futbol atractivo y contundente, un futbol superior al rival y demostrar porqué es favorito. No lo hizo del todo, y al parecer no es tan favorito como parecía.
Otro mundo. Otro torneo. Otro futbol. Futbol de verdad. Ha comenzado la Eurocopa 2016, y sí, es otra cosa. Es otro futbol.
El problema es que el partido inaugural parecía partido de repechaje, y no de inauguración; en realidad hubo pocas emociones y poco espectáculo. Ambos equipos tenían tanto en mente que terminó siendo un partido lento y seco. Y la culpa la tuvo Rumania, quien se paró con carácter y bajó a Francia de las nubes para desesmascararlo y mostrarle al mundo que es un mortal más.Con muchas expectativas, Francia llegaba al partido uno de la Europa como favorito absoluto; sobre todo en éste primer encuentro, donde era favorito para ganar hasta por goleada. Pero lejos se quedó de ganar con autoridad y dejar claro quién manda en casa. Y está claro que la casa no tiene dueño.
Rumania no fue lo que parecía iba a ser. Se paró con actitud en cancha ajena, y, ante una Francia futbolísticamente modesta, compitió y por un buen tiempo acarició el triunfo. Francia no arrancó como debía haber arrancado; no propuso y ni desplegó el dinamismo que recientemente había venido mostrando. Fue un equipo precabido cuando tuvo que haber sido agresivo; es su torneo, su casa y su gente, ¿cómo es que no salió a matar?
Armas no le faltaban, lo que sí le faltó fue actitud, carácter y ambición. Todo lo que Rumania puso en la cancha, a Francia le faltó. Y si ganó fue por calidad individual, porque del juego colectivo los franceses no sacaron nada.
De Francia se esperaba mucho. Nadie esperaba nada de Rumania. Desde el inicio fue evidente que Rumania no iba a ser un equipo fácil, y vaya que no lo fue; incomodó a los galos hasta el final.
Fue notable (y preocupante) la falta de profundidad de Francia, la falta de imaginación en la última zona, pero sobre todo la falta de contundencia. Rumania resistió estoico, y eso tiene mucho mérito, pero también porque Francia nunca terminó de meterse al partido. Rumania tuvo varias claras en el encuentro, producto de su pobre pero eficaz trabajo ofensivo, pero producto también del pobre rendimiento ofensivo de Francia (véase el penal de Evra).
Una genialidad individual --Dimitri Payet-- salvó a Francia de una pifia y posiblemente de un fracaso. De hecho, el juego y la calidad individual sacó avante a Francia; Rumania no tiene el talento que Francia, y esa fue la única diferencia.
El problema para Francia es comenzar a desplegar un futbol adecuado y eficiente, porque con la muestra que dieron en su primer partido no les alcanza ni para los 8vos. No dejan de ser favoritos, pero ya no son tan favoritos como antes, sobre todo por Inglaterra, que está (o estaba) un escalón abajo de los franceses.
Este primer encuentro podría significar muchas cosas: entre otras, que no será fácil para las potencias --o al menos para los equipos favoritos--, que serán duelos reñidos y que los favoritos en realidad no lo son tanto.
Foto | Getty Images
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