Viajando a ningún lugar con Ricardo Arjona

Nuevamente estuve escuchando la misma canción pero con difente melodía, aunque en realidad no había mucha diferencia. La frase "evolución musical" no existe en el diccionario de antónimos de Ricardo Arjona.

Navegando por las aguas turbias de internet, me topé con el link del último disco de Ricardo Arjona, que como todos sus discos, siempre tienen un título pretensioso (al igual que su contenido), y este disco no es la excepción. Viaje, así se llama el último álbum "inédito" del cantante guatemalteco. Y pues decidí escucharlo, y nuevamente me hizo exclamar lo que siempre he pensado de Arjona: ¡Qué mierda de cantautor!

¿En serio? Hasta cuándo vamos a seguir aguantando a éste vómito de baño público. Su disco no sólo es una porquería en muchos sentidos, sino que sigue siendo el mismo insulto de siempre; nos pretende vender poesía profunda con las mismas burradas de siempre, y lo peor de todo es que ahora su método es mucho más marcado, como si lo hiciera a propósito --al parecer ya se dio cuenta que escribir la misma canción pero con diferente nombre es bien recibido por sus admiradores, y como ninguno de éstos tiene la capacidad para reconocer la mierda, Arjona se ha puesto a componer ridiculeces tras ridiculeces--. En realidad se trata del mismo disco que ha venido produciendo desde que irrumpió en la música; la misma canción, la misma letra, la misma música, los mismos arreglos, los mismos acordes, la misma lírica barata, la misma filosofía de cantante de bar y las mismas estupideces.

Si tomáramos todas las canciones de todos sus discos, las mezcláramos y las colocáramos en cada uno de sus discos "inéditos", no sabríamos distinguir entre las canciones viejas y nuevas. Así de patético es la forma en que Arjona compone. Yo, cuando escuchaba el disco, no sabía si era material inédito o grandes éxitos o si estaba oyendo un disco anterior; en realidad el estilo, los arreglos, las letras y las omnipresentes comparaciones absurdas, las retóricas, la "sátira" y las contradicciones ridículas eran las clásicas, las de cajón, las que siempre escuchamos en cada una de sus canciones de cada uno de sus discos.

Es realmente impactante cómo un "artista" continúe en la misma línea sin la más mínima capacidad de evolucionar, innovar. Sin la intención de cambiar, de reinventarse. Un artista, después de haber recorrido un largo trayecto, no puede llamarse artista si su última obra es igual a la primera. La carrera de Ricardo Arjona ha sido una burda y llana línea recta. ¿De qué le ha servido a Arjona tantos años vividos en la música, tanta experiencia adquirida y vivida si aún continúa escribiendo la misma canción?

Lo único nuevo de Arjona es que se cortó la cabellera.

Pero a mí lo de Arjona ya no me sorprende tanto. Lo que sí me sigue llamando la atención son sus seguidores, millones de seguidores, que no se cansan de tragar las tonterías recicladas de éste seudocantautor. Esto nos habla del pobre nivel intelectual de sus fans y de la abismal ignorancia en la que viven sumergidos; haciendo alusión a unas de las canciones de Arjona, sus fanáticos se la pasan tocando fondo. Nada más es cuestión de leer, escuchar la manera en que tratan de defender a Arjona: insultos, términos despectivos, descalificaciones; falacias, muchas falacias, sarcasmo ignorante y sin siquiera refutar las críticas. Una persona que se expresa de ésta manera, es un completo idiota.

Si quisiéramos conocer el nivel intelectual de una persona, sólo habría que preguntarle si le gusta la música de Arjona y si sus letras le llegan. Con eso es más que suficiente para saber si es o no un analfabeta.

No es necesario tener amplios conocimientos musicales, ser un erudito en la materia para darse cuenta que Arjona es un completo imbécil. Un tipo que compone idioteces, que vive en Estados Unidos (cuando se dice ser un anti-imperialista), que ha hecho milllones y que se da la gran vida gracias a la ignorancia de la gente que compra su música (si se le puede llamar "música" a sus puñetas), lucrando con la pobre educación de los latinoamericanos, que son los que mayormente se fuman sus pajas mentales. "Pero no sólo en Latinoamérica Arjona es conocido, su música resaba fronteras..." Eso no significa que Arjona no sea un fraude. Significa que en todo el mundo existen analfabetas.

En una zona tercermundista donde el arte literario es casi nulo, es hasta normal que trolls como Arjona cosechen éxitos tras éxitos con seuopoesía. ¿Qué otra cosa podíamos esperar de Latinoamérica? Es un territorio que casi no lee, donde han surgido aberraciones como el reguetón y donde el vulgo es fácilmente embaucada con fórmulas tan básicas como las que utiliza Arjona. En América Latina, cualquier persona con un diccionario de antónimos puede hacerse millonario vendiéndole a la gente "música filosófica".

Una persona que cree que Ricardo Arjona es un poeta, que cree que es el más grande poeta musical de latinoamérica, que cree que sus letras son conmovedoras, es una persona que nunca en su retórica vida ha leído a un poeta de verdad. Jorge Luis Borges, Alejandra Pizarnik, Neruda, Octavio Paz, etc., etc., etc., han creado grandes obras porque llevan consigo el que hacer poético. Arjona es un trovador de autobús. El que se conmueva con las canciones de Arjona, es un analfabeta con desorden mental.

A Ricardo Arjona habría que reconocerle su capacidad pero para vender basura musical. Gracias a la sencillez de sus composiciones (fácil de digerir para cualquier persona con un mínimo de dos neuronas), sus melodías pegajosas (para sus seguidores, claro) y su cegadora intelectualidad, así como el nivel filosófico que maneja, Arjona es un dios para los latinos. Claro está, es un semidios porque los iletrados que consumen su música, aferrados a su escaso nivel intelectual, se dejan impresionar fácilmente con cualquier tarugada como "Yo trovador y tú estudiante de economía. Tú con los números, yo con la filosofía".

Viaje es un disco increíblemente superficial. Es idéntico a todos los discos que ha sacado. No hay nada diferente con respecto al anterior. ¡Todas las canciones se parecen! Suenan igual. Hasta pareciera que el disco contiene una sola canción pero dividida en varias partes.

¿Quién se cree que es? Sólo los analfabetas se tragan el cuento de que Arjona es un filántropo, el filósofo que América Latina necesitaba; la voz de los oprimidos, un rebelde, un trovador que se revela ante el sistema... ¡Por favor! Arjona no es más que el reflejo del retraso cultural e intelectual de América Latina.

Para terminar, los dejo con las mejores frases ridículas de este disco. Que si se dan cuenta, hasta pareciera que fueron escritos por un humorista criticando el método arjoniano.

—Lo poco que tengo es tan poco que vale un millón

—Colapsado caigo al fondo y en picada, y no tengo ni el valor pa' ser cobarde

—Ir a la Luna en bicicleta es más fácil que olvidarte

—Más tarde que mañana

—Más lejos que el pasado

—...Tan perdido como el tiempo que me gasto en encontrarle una quinta pata a un gato cojo

—Tu boca fue el principio de mi fin

—Tu cuerpo es un bebé con metralleta

—Encontré lo que jamás había buscado

—¿Cómo es que un corazón invertebrado se quiebra por lo mucho que te extraña?

—Las cosas que dijiste con la boca, archivan toda la jurisprudencia

—Tu boca se desboca

—Te olvidas que el que olvida nunca invoca

—Más sabe un ciego que un idiota de la luz

—Mentíamos con toda honestidad

—Como sapiens en pleno siglo XXI

—Éramos dos y nos bastaba

—Jamás hablamos del futuro, sólo el presente era seguro

—Hoy empieza lo que ya se terminó

—El ayer lo dejó todo pa' mañana; el mañana cuando esté, yo ya me fui

—Caigo hasta el fondo del mar, arañando la burbuja en que no estás

—Quiero ser lo que no he sido, sepultar lo que se fue

—Tanta agua y tanta sed. Tengo sed de estar cansado

—Jubilé a cupido, harto del fracaso

—Yo no sé cuándo empezó la eternidad, y cuándo será el final de lo que fue