Ayer, un fantasma afinó mi guitarra... Me inspiró. Papel y lápiz en mano, apunto la canción y me negué a escribir, porque hablar y escribir sobre fantasmas... me da miedo.
Un intenso momento de soledad, hizo que me hundiera en los recuerdos, donde, irónicamente, mi única compañera era la soledad.
Busqué entonces una forma de recuperarme y seguir adelante con mis sentimientos; es así que decidí ponerme a escribir lo que sentía, y el resultado fue muy inesperado, pero realmente agradable. No sólo pude salir de aquel abismo de tristeza en el que me encontraba, sino que además descubrí que tengo talento para componer poemas, y luego transformar esos delicados poemas en canciones.
Escribir y expresar mis penas y tristezas en forma de versos fue mi mejor terapia, y al final, no sólo pude recuperarme del trago amargo en el que vivía, sino que también pude adentrarme en uno de mis tantos talentos ocultos que poseo.
De de esta manera, aquel momento de nostalgia y tristeza, fue plasmado (gracias a mi desconocido talento) en una canción. Sí, un pequeño texto donde desahogaba mis penas, terminó por convertirse en una apasionante canción que hoy les compartiré.
No hace falta decir sobre qué habla la canción, pues la canción habla por sí sola.
Entonces, aquí está la letra de la canción que nació de lo más profundo de mi soledad. Espero que les guste, porque, en serio, es lo más honesto que jamás haya escrito.
Olvidarte es más difícil que encontrarse a un Papa gay,
que defender a los árbitros, o apoyar a Elba Esther.
Más difícil que encontrarse un nórdico en América Central,
más difícil que un homófobo ateísta y marica.
Olvidarte es más difícil que una dama en un putero,
que encontrarse a un nazi negro, o a un ebrio sin tomar,
más difícil que MTV en la televisión abierta.
Olvidarte, es tan difícil olvidarte.
Olvidarte, olvidarte... Es querer hacer de un Tecate una Caguama,
es creer que la mujer es sólo una vagina para disfrutar,
olvidarte es manejar sin combustible.
Olvidarte, olvidarte... Incluso es más difícil que embarazarte.
Si extraño tus prótesis y tus senos sin pezón,
cómo no extrañar tu dedo en mi colón.
Olvidarte es como AMLO, pues nadie lo quiere tanto,
porque AMLO es tan terco, pero me divierte mucho más.
Y he llegado a sospechar que me parezco tanto a AMLO,
pues estoy enfermo de recuerdos.
Masturbarme es lo que hago para olvidar tu vagina,
harto de seguir follando con la güila de tu tía,
espero que un día por error o por la calentura,
te vuelvas a acordar de mí por mis huevos.
Olvidarte, olvidarte... Es querer jalarle el vello a un lampiño,
es hacerse un "selfie" sin un teléfono celular,
olvidarte es aceptar que MEV no existe.
Olvidarte, olvidarte... Incluso es más difícil que matarte.
Si extraño tu anorexia y tu comida sin sazón, cómo no extrañar
tu vómito en mi colchón.
Es querer jalarle el pene a una ballena,
Es querer hacerse una paja pero sin eyacular,
olvidarte es como negar que amo a Hitler.
Olvidarte, olvidarte...
Foto | Ximinia
Reviewed by José L. Bravo
on
8:48 p.m.
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